Observar la calma de las aguas de un lago aquieta mi espíritu y sosiega el vaivén de mi cotidianidad.
La naturaleza reluce en todo su esplendor, y las aguas cristalinas reflejan la belleza del renacido verdor.
Quisiera llevarme el rumor suave para escucharlo siempre "en lo más hondo del corazón."
Me
levantaré ahora e iré, iré a Innisfree,
y haré allí una humilde cabaña de arcilla y zarzas;
nueve hileras de judías tendré allí, una colmena que me dé
miel
y viviré solo en un claro entre el zumbar de las abejas.
y cae desde los velos matinales a donde canta el grillo;
allí la medianoche es una luz tenue, y un cárdeno brillo el mediodía,
y colman el atardecer las alas del pardillo.
oigo el rumor del lago ante la orilla;
cuando estoy en la calzada, o en las grises aceras,
lo oigo en lo más hondo de mi corazón.
William Butler Yeats (La isla del lago de Innisfree)
¡Feliz semana!