"Mujeres de mi vida" (por Rosana)
Seguramente ustedes no las ven, pero detrás de esas sábanas al viento están las mujeres de mi vida. Miren con detenimiento, allí están las manos cobrizas de ni nonna, con un gesto triunfal porque el lino se blanqueó al sol. Había estado refregando con espuma de jabón blanco, las manchas amarillas que el encierro en el baúl durante la travesía por el Atlántico, provocó.
Quitar las manchas, obtener la pulcritud a fuerza de lavar y lavar a mano, tenía para ella el tono del triunfo. Estoy segura que al apreciar el fruto del esfuerzo, sus oídos escuchaban la música de "Carrozas de Fuego".
Sigan observando, yo la veo, ustedes ¿no?. Los brazos estirados de mi madre, colgando los pañales de gasa. Sogas y sogas de pañales blancos como la nieve, cuanto más blancos, más madre se sentía, porque ser madre tenía que hacer doler hasta las manos.
Más pequeña y tímida, sale por detrás de un lienzo libre, mi tía, que escondía su infancia y su tristeza, que temerosa pensaba en la tierra que no volvería a ver.
Me gustaba decir y pensar de chica que tenía tres madres, todas para mí. Cada una de ellas se eleva hacia el sol y yo las miro volar entre esas nubes que juegan con las telas de lino, las hace llegar hasta el cielo, las secan y las devuelven.