significa mantener la mente en un punto y
es la profundización en la concentración mental,
que va de la mano de la ausencia de conciencia sensorial
y es el paso previo que se trabaja
antes de acceder a dyana
o meditación.
En el Mahabharata hay un relato que ilustra
la intensidad de la concentración requerida para esta práctica:
El Acharya Drona les estaba enseñando tiro al arco
a los Pandavas y a los príncipes Kuru,
y les pidió que observasen un pajarito de barro colocado
sobre una rama en la copa de un árbol con el fin
de dispararle una flecha en el ojo.
A cada uno le preguntaba
¿Qué ves?
El primero de los príncipes dijo:
Veo el bosque, el cielo, el árbol, las hojas, la rama y el pájaro.
El gurú dijo:
No dispares, baja el arco.
El segundo le respondió:
Veo el árbol, las hojas, la rama y el pájaro
y
también le dijo a este que bajara el arco...
Así, todos los príncipes iban fracasando en la comprensión
de la enseñanza que su maestro-gurú impartía...
Finalmente le llegó el turno a Arjuna que a la pregunta
¿Qué ves?
respondió:
Veo el ojo del pájaro.
El maestro le re-preguntó:
¿No ves las hojas del árbol y la rama sobre la cual está posada el pájaro?
No -dijo Arjuna-,
veo solamente el ojo del pájaro y nada más.
El gurú le siguió preguntando:
¿Ni siquiera ves las alas del pájaro o la cabeza?
Y Arjuna replicó:
No, no veo nada más que el ojo del pájaro, eso es todo.
Entonces el maestro se dio por satisfecho,
la intensidad de su concentración era tan grande
que todas sus facultades de percepción estaban fijas
en un solo punto: el ojo del pájaro.
¡Feliz semana!
♡
Dharana Darshan
(Sw Niranjanananda Saraswati)
(Sw Niranjanananda Saraswati)
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