A mi edad, he pasado los sesenta, todo el mundo dice lo atractiva que soy. Sigo triunfando, incluso con jóvenes que con gestos y roces suben mi autoestima.
Visto sexy, como siempre, y, en ocasiones, provocativa. Continuo enamorada y haciendo el amor con cierta asiduidad con mi pareja. Me gusta que sea vigoroso conmigo.
Conversando con amigas, me comentan que no dejan que las vean totalmente desnudas. Admito que tampoco me desnudo ante él. Le gusta verme con ropa sexy y lencería provocativa e insinuante.