- «Interesante. El droide muestra una hostilidad inusual hacia la honorable Kin Robb.»
- ―Obi-Wan Kenobi
Kin Robb fue una política humana que representó al planeta Taris en el Senado de la República Galáctica durante las Guerras Clon. Reconocida por sus compañeros por su imponente estatura y su atuendo de colores claros, Robb era una senadora honrada, luchando por mejorar su mundo a pesar de las luchas generalizadas en Taris causadas por las grandes diferencias culturales y económicas. Durante las Guerras Clon libradas entre la República y su facción disidente, la Confederación de Sistemas Independientes, Robb se unió al Consejo de Sistemas Neutrales de la Duquesa Satine Kryze de Mandalore y apoyó sus batallas por la neutralidad en el Senado. Además, Robb fue una firme aliada de la Senadora Padmé Amidala de Naboo y de los intentos de su facción por desescalar la guerra.
Aunque inicialmente apoyó movimientos pacíficos y críticos con los poderes de emergencia en tiempos de guerra del Canciller Supremo Sheev Palpatine, Robb cambiaría de posición en el último año de la guerra. Robb fue una de las más críticas con el nombramiento del Barón Rush Clovis como líder del Clan Bancario InterGaláctico y, cuando se corrió la voz de que Clovis era un títere y que Scipio, sede de los bancos, estaba siendo ocupado por los Separatistas, ella estuvo entre los senadores que exigieron un contraataque para afirmar la jurisdicción de la República sobre el planeta, lo que resultó en la nacionalización del Clan Bancario por parte de la República y la expansión de los poderes ejecutivos de Palpatine. Para el tiempo del establecimiento del Senado Imperial, Robb ya no servía como representante de Taris en el escenario galáctico.
Biografía[]
Guerras Clon[]
Estallido de la guerra[]
Originaria de Taris,[1] un planeta urbano[7] localizado en el sistema Taris[8] de los Territorios del Borde Exterior,[9] Kin Robb eventualmente pasaría a representar a su mundo natal en el Senado Galáctico, el órgano legislativo de la República Galáctica, una unión democrática que gobernaba a gran parte de la galaxia.[4] La ecumenópolis densamente poblada de Taris era conocida por su disparidad económica, derivada de la contaminación generalizada del planeta y de un acontecimiento histórico que devastó el paisaje urbano y dejó al mundo en ruinas. Aunque porciones de la ciudad habían sido reconstruidas, estas secciones estaban dominadas por la élite gobernante y adinerada,[7] dejando a las clases medias y a las masas empobrecidas[4] residiendo en casas improvisadas bajo la lluvia radiactiva.[7] Como miembro de la administración tarisiana y representante de Taris en el planeta capital de la República, Coruscant, la Senadora Robb estaba decidida a luchar por su mundo a pesar de las luchas internas provocadas por las enormes diferencias culturales entre las clases altas y bajas.[4]
En el 22 ABY, la República entró en las Guerras Clon contra su estado disidente, la Confederación de Sistemas Independientes, tras una extensa Crisis Separatista.[10] Justo antes del estallido de una guerra abierta durante la Primera Batalla de Geonosis, Robb, una destacada activista por la paz, estuvo entre aquellos del Senado que se opusieron a conceder poderes de emergencia en tiempos de guerra al Canciller Supremo Sheev Palpatine, creyendo que este movimiento solo escalaría el conflicto. A medida que la guerra se extendía por la galaxia, Robb fue una de los muchos representantes planetarios que se unieron[4] al recién formado Consejo de Sistemas Neutrales, una organización parcialmente originada en la Facción Pacifista del Senado, un grupo de delegaciones de los Mundos del Núcleo que se oponían a la guerra y a la ampliación de los poderes del gobierno que conllevaba.[11] La propia Robb incorporó a Taris al Consejo, una decisión que permitiría a Taris[4] mantener sus lazos económicos con la República, pero evitando enredarse en[11] la maquinaria militar que ella criticaba.[4]
Liderado por la gobernante de Mandalore, la Duquesa Satine Kryze, el Consejo de Sistemas Neutrales ofreció a Robb la oportunidad de reunirse con líderes de ideología similar. Como miembro del Consejo de Sistemas Neutrales, Robb viajaría a la ciudad capital mandaloriana, Sundari para reunirse con la Duquesa Satine y su gobierno de los Nuevos Mandalorianos y discutir sus esfuerzos.[5] Además de la Duquesa Satine, Robb se hizo amiga y aliada de su compañero del consejo Onaconda Farr,[4] que representaba al sector Savareen.[11] Fuera de la esfera neutral, Robb se convirtió en aliada incondicional de una coalición de defensores de la paz que incluía a Farr y a la Senadora Padmé Amidala[4] del sector Chommell.[12] Al igual que esta facción de senadores, Robb se había opuesto a los poderes de emergencia del Canciller Palpatine y desaprobaba a sus compañeros que promovían la expansión militar, posturas que la convertían en parte de un grupo de senadores que podían emitir votos fiables a favor de las legislaciones de Farr y Amidala.[4]
La intriga mandaloriana[]
- «Lo que el Maestro Skywalker pretende decir es que actuamos a instancias de Su Alteza para protegerla de la Guardia de la Muerte y de los Separatistas que no comparten su punto de vista neutral.»
«Yo no he pedido tal cosa.»
«Es posible, pero la mayoría de vuestro séquito lo hizo.» - ―Obi-Wan Kenobi y Satine Kryze, discutiendo las medidas de seguridad que Robb y otros solicitaron para el Coronet
En el 21 ABY,[10] Robb estuvo presente en el Edificio de Oficinas del Senado cuando fue atacado por una Bestia Zillo desbocada, que había sido traladada a Coruscant tras ser despertada durante la Batalla de Malastare. Robb y varios de sus compañeros se encontraban caminando por un gran atrio cuando llegó la bestia, sacudiendo el edificio y haciendo que Robb tropezara mientras se encendían las luces de emergencia. Un esfuerzo liderado por la Orden Jedi y el Gran Ejército de la República resultó en la caída de la Bestia Zillo, acabando con su sendero de destrucción.[13] Poco tiempo después del incidente,[10] Robb y el Senador Farr cenaron juntos en los comedores del Edificio del Senado.[14]
El Consejo de Sistemas Neutrales estuvo en peligro cuando la Guardia de la Muerte, un grupo terrorista mandaloriano que se oponía al gobierno de la Duquesa Satine y apoyado en secreto por los Separatistas,[6] fijó como objetivo a las fuerzas de la República cerca del sector Mandalore. Como tanto los Nuevos Mandalorianos como la Guardia de la Muerte eran reticentes a la presencia de la República en Mandalore,[11] oportunistas en la República argumentaron que la amenaza de la Guardia de la Muerte justificaba una ocupación militar del planeta, supuestamente para proteger al pueblo mandaloriano, tan solo una excusa para incorporar[15] al codiciado espacio de Mandalore[11] al esfuerzo de guerra.[15] Esperando conservar la neutralidad de Mandalore, la Duquesa Satine Kryze se preparó para testificar ante el Senado y luchar contra una resolución que aprobaba la ocupación. Ella invitó a varios senadores para que la acompañaran en su viaje,[6] incluido tres senadores del Consejo de Sistemas Neutrales: Robb, Farr, y el Senador Tal Merrik de Kalevala.[5] También estuvo invitado el Senador Orn Free Taa de Ryloth,[1] que no era miembro.[5]
Para disgusto de Kryze, Robb y los demás dignatarios solicitaron a un contingente de soldados clon de la República, la Legión 501 y el 212º Batallón de Ataque, liderado por los Generales Jedi Obi-Wan Kenobi y Anakin Skywalker, para que los acompañara a bordo del yate de Kryze, el Coronet.[6] Robb y sus compañeros viajaron a Sundari para reunirse con Kryze antes de subir a bordo del Coronet, tras lo cual partieron hacia Coruscant.[5] Poco después de dejar Sundari, Robb y el resto del séquito de Kryze disfrutaron de unas bebidas en su sala del trono, donde la duquesa manifestó su opinión sobre la guerra. El viaje se hizo tenso cuando Kenobi y Skywalker entraron en la sala, donde Kenobi hizo contrapuntos a favor de la guerra para irritar a Kryze, con quien tenía una historia personal. Mientras ambos discutían, Robb y los demás observaban incómodos. Kenobi y Kryze no tardaron en enfrentarse, momento en el que Merrik los separó sugiriendo que se preparasen todos para la cena.[6]
Para el momento de la cena, Kryze se había calmado y se unió a Robb, Farr, Merrik y Taa en el comedor del Coronet, donde les sirvieron patas de nuna fritas. Sin embargo, poco después de la comida, Kenobi les alertó de que Skywalker y los clones habían descubierto droides sonda asesinos en las profundidades de la bodega de carga. Aunque Skywalker y los clones pudieron detener a uno de los droides, el otro subió por el hueco del ascensor y se dirigió al comedor. Por orden de Kenobi, Robb y los demás retrocedieron, y pronto, el droide asesino irrumpió en la sala. Aunque Kenobi logró destruir al droide con su sable de luz antes de que pudiera acercarse a los políticos, docenas de sondas diminutas salieron del droide más grande y empezaron a correr por la habitación.[6]
Mientras Robb y los otros senadores intentaban evadir al enjambre de droides, Kenobi y Kryze, que sacó una pistola desactivadora oculta, empezaron a eliminarlos juntos. Las sondas pronto fueron desactivadas y destruidas, permitiendo a los senadores recomponerse mientras el terror remitía. Con la amenaza aparentemente superada y Kryze y Kenobi reconciliados, Robb y el resto del séquito volvieron a reunirse más tarde para el postre. No llevaban mucho tiempo sentados cuando Kenobi entró en la sala con una bandeja cubierta que, según reveló, contenía un pequeño droide sonda aún activo. Explicó que la caja que contenía los droides más grandes había sido autorizada a subir a bordo de la Coronet con el sello del Senado, lo que significaba que uno de los cuatro senadores presentes los había introducido de contrabando en la nave para asesinar a la Duquesa Satine y a los otros tres. Para identificar al culpable, Kenobi planeaba probar ante qué personas reaccionaba el droide.[6]
A pesar de las objeciones de Kryze de que su prueba rozaba la tortura, Kenobi empezó a caminar alrededor de la mesa con el droide. Tras dejar atrás a Taa y Farr, Kenobi pasó junto a Robb. Mientras el droide se estrellaba contra el lateral de la tapa del plato, Kenobi observó que el droide mostraba más hostilidad hacia Robb que hacia Taa y Farr. El droide se calmó al acercarse a Merrik, confirmando que él estaba detrás de los intentos de asesinato. Merrik tiró la bandeja de las manos de Kenobi, liberando a la sonda. En medio del consiguiente desorden, Kenobi apartó al droide de Kryze con la bandeja, sólo para que inutilizara a un droide de protocolo antes de atacar al Senador Farr, haciendo que Robb lanzara un grito de horror. Mientras Kenobi estaba distraído intentando destruir a la sonda, Merrik tomó a Kryze como rehén y se puso en contacto con la Guardia de la Muerte, que envió naves de abordaje Separatistas para atacar al Coronet. Una vez destruida la sonda, Kenobi partió para enfrentarse a Merrik mientras Skywalker y los clones luchaban contra los droides de combate que se encontraban a bordo.[6]
Farr, Robb, y Taa permanecieron a salvo lejos del tiroteo, que terminó con la victoria de los Jedi, que liberaron a Kryze, mataron a Merrik y destruyeron al grupo de abordaje Separatista. Tras el accidentado viaje, el Coronet aterrizó en Coruscant, donde la Duquesa Satine y sus invitados se reunieron con el Canciller Supremo Sheev Palpatine, que los estaba esperando, y subieron a bordo de un transporte con destino al edificio del Senado.[6] Robb estuvo posteriormente presente para escuchar a Kryze defender la neutralidad de Mandalore ante el Senado, pero un testimonio adulterado del Viceministro mandaloriano Jerec convenció a la mayoría del Senado para votar a favor de una ocupación de la República. Con un gran riesgo personal, Kryze logró acceder al testimonio original de Jerec, en el que argumentaba contra la ocupación, y lo presentó al Senado con la ayuda de Kenobi y de la Senadora Amidala, convenciendo al Senado de revocar su decisión anterior y concede a Mandalore una neutralidad continuada.[15]
Crisis de rehenes[]
- «Lamento molestarle, Canciller, pero he tomado el control del ala este de su Edificio del Senado, y los ocupantes son ahora mis rehenes. Si le importan, le aconsejo que libere a Ziro el hutt de su Centro de Detención.»
- ―Cad Bane habla al Canciller Palpatine sobre sus rehenes, entre los que se encuentra Robb
Tiempo después, Robb fue uno de los senadores invitados a un banquete de estado ofrecido por Padmé Amidala en su residencia en el complejo de apartamentos del Senado.[16] Aunque aparentemente se trataba de una fiesta de cumpleaños para el Senador Aang,[17] la reunión también era un intento por parte de Amidala de convencerle para que apoyara una votación sobre un tratado, ya que él tenía el voto decisivo sobre el Comité de Supervisión Militar. En la velada, en la que participaron los Senadores Mon Mothma[16] de Chandrila,[1] Bail Organa[16] de Alderaan,[1] Jakker-Sun, Dantum Roohd, y el General Skywalker, Robb disfrutó de una bebida mientras los políticos se mezclaban en el salón de Amidala, que había duplicado su tamaño con parte de él al aire libre. Habiendo sido persuadido por los esfuerzos de Amidala, Aang levantó una copa y brindó por la firma del tratado y por su postre favorito, el pastel de fruta jogan, que Amidala se había preocupado de preparar para la fiesta.[16]
Posteriormente, en un intento de conceder al Canciller Palpatine y su oficina poderes sin precedentes[18] y amplios[11] para espiar a los ciudadanos de la República sospechosos de tener vínculos con los Separatistas, un proyecto de ley fue presentado en el Senado, irónicamente con el nombre de Proyecto de Ley de Invasión Incrementada a la Privacidad.[2] Numerosos senadores contrarios a la guerra se opusieron fuertemente a la medida, y pronto un pequeño grupo político de resistencia fue creado para matar al proyecto de ley en el Senado.[18] El día de la votación, Robb fue invitada por el Senador Philo[2] de Kinyen,[1] un líder del grupo informal, a una reunión en el atrio del Ala Este del Edificio de Oficinas del Senado para discutir la moción junto a otros senadores opositores. También presentes en la reunión de Philo junto a Robb se encontraban los Senadores Farr, Amidala, Organa, Jakker-Sun, Roohd, Riyo Chuchi, y Zinn Paulness. En la reunión, el grupo de senadores acordó conjuntamente que debían tumbar el proyecto de ley antes de que el Canciller Palpatine pudiera tirarlo adelante.[2]
No obstante, mientras la reunión concluía, las puertas de la sala se abrieron repentinamente, y un grupo de cazarrecompensas entró y rodeó a los políticos. Mientras Robb se mantenía cerca de Jakker-Sun, el líder de los mercenarios, Cad Bane, disparó con su bláster al techo para llamar su atención, y entonces anunció a los senadores que ahora eran sus rehenes. Aunque Robb y casi todo el mundo obedeció, Philo disintió e intentó marcharse, solo para ser disparado por la espalda y asesinado por Cad Bane. Mientras Robb miraba impactada, Cad Bane ordenó a los senadores restantes reunirse en el centro del atrio y ordenó a los cazarrecompensas bajo su mando que los registraran. Con el grupo de senadores como rehén, Cad Bane contactó con la oficina del Canciller Palpatine y exigió la liberación de Ziro Desilijic Tiure de su apresamiento en el Centro de Detención Judicial Central de la República a cambio de los poíticos.[2]
Tras comunicar sus exigencias a Palpatine, Cad Bane hizo que sus cazarrecompensas cortaran la energía del edificio, privando al Canciller de contacto con el exterior y dejando a los rehenes iluminados únicamente por las luces de emergencia y la luz del sol que entraba a través del techo del atrio. Cad Bane comenzó a caminar alrededor de los senadors, exigiendo la entrega de sus comunicadores. Antes de que pudieran registrar a Robb, Cad Bane avistó al General Skywalker en el nivel superior del atrio y disparó contra el Jedi. Cad Bane envió a Aurra Sing y otros dos cazarrecompensas a perseguir a Skywalker, que había escapado del ataque de Cad Bane. Mientras Cad Bane y los demás mercenarios estaban distraídos, Robb y sus compañeros empezaron a hablar entre ellos, pero Cad Bane se dio cuenta de ello y emitió otro disparo de advertencia contra el techo para silenciarlos. Cad Bane contactó de nuevo con la oficina del Canciller y ordenó a Palpatine redactar un indulto para Ziro y mandarlo junto al Senador Taa, que se encontraba con Palpatine en su oficina, a la prisión.[2]
Sing y el resto del equipo de Cad Bane pronto regresaron al atrio con un inconsciente y esposado Skywalker, y entonces lo lanzaron junto a los senadores. Cuando recibió una confirmación de que el Canciller había enviado a Taa al centro de detención con un indulto para Ziro, Cad Bane y su equipo colocaron bombas en los pilares de la sala, que emitieron un campo láser que atrapó a los senadores en el centro de la sala. Cad Bane les informó de que perturbar los sensores activaría las bombas, matándolos y destruyendo el atrio. Con los rehenes atrapados, Cad Bane y sus cazarrecompensas abandonaron el edificio del Senado para reunirse con un transporte que ahora llevaba al liberado Ziro. Sin recursos, Robb y los demás permanecieron en el lugar, esperando que Skywalker recuperara la consciencia. Cuando el Jedi despertó, Farr le informó de que Cad Bane les había ordenado permanecer quietos y le instó a seguir su orden, pero Skywalker disentió.[2]
Tras recibir su sable de luz de Amidala, que le dijo que lo había encontrado en los alrededores, Skywalker hundió su hoja en el suelo y empezó a cortar un círculo alrededor de los senadores. Mientras lo hacía, los dispositivos de la sala comenzaron a emitir unos pitidos cada vez más agudos, puesto que Cad Bane había planeado detonar las bombas a pesar de su promesa al Canciller de que no dañaría a los senadores. Cuando Skywalker completó el círculo, el suelo se hundió antes de que las bombas explotaran, enviando a Robb y a los senadores a un nivel inferior, sobreviviendo por poco a la destrucción de las bombas. Aunque tosía y estaba aturdida por la dura caída y el humo resultante, Robb quedó ilesa. Debido a la supervivencia de los senadores, la República envió un destacamento militar detrás de Cad Bane y su equipo, que habían escapado utilizando las bombas como elemento disuasorio.[2] Cuando el Senado volvió a reunirse tras la crisis, el grupo de resistencia que se formó contra el Proyecto de Ley de Invasión Incrementada a la Privacidad logró con éxito su derrota en el Senado.[18]
Agitación en el Senado[]
La batalla por la paz[]
Más adelante en el 21 ABY,[10] tras la caída de una iniciativa de paz promovida por la Senadora Amidala y la Senadora Confederada Mina Bonteri, así como un atentado Confederado en Coruscant que destruyó la red de distribución de energía del planeta, el Senado se vio envuelto en una intensa agitación. Aunque el ataque a Coruscant sirvió para que los senadores militaristas impulsaran leyes que favorecieran su agenda, incluido un exitoso proyecto de ley para desregular al Clan Bancario InterGaláctico para facilitar nuevas líneas de crédito,[19] la facción progresista[12] y contraria a la guerra encabezada por Organa, Amidala, Farr, y Mon Mothma[19] de Chandrila[1] se mantuvo firme en su lucha contra la escalada de la guerra.[19] Una amiga y aliada de estos senadores, Robb apoyó sus esfuerzos[4] así como un decisivo discurso que pronunció Amidala en oposición a un proyecto de ley propuesto por la Senadora Halle Burtoni de Kamino para incrementar la producción de soldados clon, que desviaría fondos públicos hacia un incremento del gasto militar. A pesar de la recepción positiva del discurso de Amidala,[19] el Senado finalmente aprobó la medida de Burtoni.[20]
Como respuesta, Amidala y Farr presentaron una contralegislación destinada a frenar los efectos financieros que tendría el proyecto de ley. Robb siguió aplaudiendo su trabajo, incluido otro discurso pronunciado por Padmé. Gracias a los esfuerzos de la facción, el proyecto de ley de reducción del gasto estuvo a punto de obtener una escasa mayoría en el Senado, pero cuando se acercaba la votación, Farr murió repentinamente de lo que parecía ser un fallo cardíaco. Robb asistió a un servicio funerario en los cielos de Coruscant, donde lloró la pérdida de su buen amigo y aliado. Tras escuchar un discurso del ayudante de Farr, Silood, Robb observó solemnemente a la Guardia del Senado saludar con las armas mientras su ataúd era cargado en un transporte. En una serie de decepciones para el movimiento pacifista, una investigación de la Fuerza de Seguridad de Coruscant descubrió que Farr había sido envenenado por[20] la Representante júnior de Rodia,[1] Lolo Purs, lo que, en parte, impulsó al Senado a rechazar la reducción presupuestaria del difunto senador.[20]
Juicio de Ahsoka Tano[]
- «Ahsoka Tano, se te acusa de secidión contra la Orden Jedi y la propia República. Este tribunal decidirá tu destino.»
- ―El Canciller Palpatine, dando comienzo al juicio de Ahsoka Tano
En el 19 ABY,[10] en medio de protestas públicas contra la Orden Jedi, que muchos consideraban que había renegado de sus valores profesados de mantenimiento de la paz[22] en favor de convertirse en parte de las Fuerzas Armadas de la República,[6] un hangar del Gran Templo Jedi de Coruscant fue bombardeado. El acto terrorista resultó en numerosas muertes, incluido ocho soldados clon, doce trabajadores civiles,[23] y seis Jedi. Una investigación interna de la Orden Jedi condujo al arresto de Letta Turmond, una activista radical contraria a la guerra que había alimentado con explosivos nanodroides a su marido, Jackar Bowmani, un trabajador del Templo, convirtiéndolo en una bomba viviente.[22] Mientras se encontraba apresada en el Centro de Operaciones Militares de la República, Turmond fue asesinada mientras se reunía con la Padawan Ahsoka Tano, una de los investigadores Jedi, que huyó del complejo. Se desencadenó una persecución, que terminó con la captura de Tano en los niveles bajos de Coruscant, junto a pruebas que apuntaban a su culpabilidad en el atentado.[21]
A pesar de la intención del Alto Consejo Jedi de celebrar un juicio interno, los miembros de Senado y los líderes de las Fuerzas Armadas de la República creían que un juicio liderado por Jedi sería parcial. Para facilitar un tribunal militar en un tribunal de la República, el Senado solicitó a los Jedi que expulsaran a Tano de la Orden. Ante las pruebas de la existencia de explosivos nanodroides en el almacén en el que había sido capturada Tano y la creciente presión del gobierno, el Consejo Jedi accedió y acusó formalmente a Tano de sedición contra la República. Tano fue expulsada de la Orden y desposeída de todos los títulos y privilegios del Gran Ejército de la República, y entonces fue entregada formalmente a la justicia de la República a la espera de su juicio. Aunque el Canciller Palpatine presidiría los procedimientos, Tano sería juzgada por un tribunal de senadores, incluida Robb. En la enorme sala de audiencias del Centro de Operaciones Militares, Robb y sus compañeros del jurado estuvieron sentados en filas con vistas a las plataformas utilizadas por la acusación, la defensa y la acusada.[21]
Cuando comenzó el juicio, Robb, sentada entre la Senadora Chuchi y un representante bith, observó cómo una Tano maniatada era escoltada hasta una plataforma flotante en el centro de la sala. El Vicepresidente Amedda levantó la sesión y el fiscal, el Almirante de la República Wilhuff Tarkin, y la defensa, la Senadora Amidala, entraron en la sala. Después de que el Canciller Palpatine enumerara los cargos de sedición contra Tano, dio la palabra a Tarkin. Tarkin argumentó que Tano había sido la autora intelectual del atentado contra el Templo Jedi y que luego había eliminado a sus cómplices, entre ellos Turmond. El Almirante declaró abiertamente que buscaba una sentencia dura por parte del jurado y consideró que la pena de muerte no estaba injustificada. Más tarde, Robb observó atentamente cómo Amidala presentaba su defensa, argumentando que Tano estaba siendo inculpada de la muerte de Turmond por el verdadero autor del atentado.[21]
En respuesta, Tarkin reveló que Tano había sido visto acompañada por Asajj Ventress, una antigua agente Separatista, mientras se encontraba a la fuga. Tano protestó diciendo que Ventress la había incriminado y que su Maestro Jedi, Anakin Skywalker, lo demostraría. Tras los alegatos finales, Palpatine expresó su opinión y sugirió que Tano formaba parte de un plan Separatista para separar a los Jedi y a la República. Poco después, Robb y el resto de los miembros del jurado tomaron una decisión. Sin embargo, cuando Palpatine se preparaba para leer el veredicto, Skywalker y un contingente de Guardias del Templo Jedi irrumpieron en la sala del juicio, llevando consigo a la Jedi Barriss Offee. Skywalker anunció que Offee era el verdadero cerebro del atentado, y ella confesó directamente haber orquestado el atentado e incriminado a Tano, por lo que Palpatine ordenó su arresto. Tano fue liberada por el tribunal, pero el proceso la dejó deccepcionada y declinó una invitación para reincorporarse a la Orden Jedi.[21]
Invasión de Scipio[]
- Canciller Palpatine: «Vengo ante vosotros con graves noticias. El Conde Dooku y sus traidores Separatistas nos han manipulado, amigos míos. [...] Clovis ha sido su marioneta para engañarnos mientras los Separatistas invaden Scipio.»
- Kin Robb: «¡Debemos detenerlos y asegurar el planeta!»
- Meena Tills: «Hemos entregado todo el sistema económico al Conde Dooku.»
- Mot-Not-Rab: «¡Estamos perdidos! ¡Invasión!»
- ―Kin Robb exige una invasión de Scipio por parte de la República [fuente]
No mucho después del juicio de Ahsoka Tano,[10] la situación financiera de la República y su relación con el Clan Bancario InterGaláctico se vio sometida a un mayor escrutinio en medio de informes de que el banco y sus activos eran inestables. La Senadora Amidala fue enviada para resolver los asuntos entre la República y el Clan Bancario, pero mientras se encontraba en la sede del Clan Bancario en Scipio, ella y el antiguo representante del banco en el Senado, Rush Clovis, descubrieron que el Clan Bancario estaba al borde de la bancarrota y tenía poco capital en sus bóvedas. Creyendo que su descubrimiento podría dar lugar a una reforma significativa del liderazgo del Clan Bancario, Amidala y Clovis regresaron a Coruscant con unos archivos robados y Palpatine les concedió permiso para continuar su investigación bajo la jurisdicción de la República. Sin embargo, a pesar de las buenas intenciones de Clovis, se encontró con el escepticismo de muchos en el Senado,[24] incluida Robb,[25] debido a sus actividades traicioneras previas a su destitución, que incluían el desvío de créditos a proyectos Separatistas.[24]
Amidala y Clovis pudieron demostrar que los fondos del Clan Bancario habían sido desviados a cuentas privadas por su consejo de liderazgo, los Cinco Núcleos. Como resultado de estos descubrimientos, el Clan Bancario destituyó a los Cinco Núcleos y acusó a cada uno de sus miembros de corrupción. Dado que los bancos carecían de un líder formal, Clovis fue considerado para el puesto y se ganó el apoyo de los muun de Scipio, así como del Parlamento Separatista, dejando al Senado de la República como el obstáculo restante. Cuando Clovis habló ante el Senado en un intento de ganarse la nominación, se encontró con una amplia gama de respuestas, con muchos en el Senado poco dispuestos a confiar en él hasta que el Canciller anunció su apoyo. Aunque Robb seguía insatisfecha y no apoyaba el nombramiento, el recuento final de votos demostró que estaba en minoría, y el Vicepresidente Amedda confirmó que Clovis contaba ahora con el apoyo de la República. Una vez finalizada la decepcionante sesión, Robb recorrió los pasillos del Senado.[24]
Frustrada por la disposición del Canciller Palpatine a apoyar a Clovis, Robb, entre otros, advirtió de que los antiguos lazos Separatistas de Clovis seguían siendo peligrosos para la República.[4] Aunque parecía que, como recién nombrado jefe del Clan Bancario, Clovis promulgaría una reforma significativa, la fuerte desconfianza de Robb se demostró justificada, ya que Clovis había hecho un trato en secreto con el Conde Dooku para conseguir el nombramiento. Dooku chantajeó a Clovis negándose a pagar los intereses de los préstamos concedidos a la Confederación, obligando a Clovis a subir los tipos de interés de los préstamos de la República para salvar a los bancos de la catástrofe financiera. Como Amidala se encontraba en Scipio para la toma de posesión de Clovis, informó a Palpatine de esto, y el Senado se reunió para discutir el asunto.[25] Furiosa por este giro de los acontecimientos,[4] Robb, junto a otros senadores que habían disentido de apoyar a Clovis, incluido Mot-Not Rab y Meena Tills, vocalizó su enfado.[25] Robb, en particular, subrayó que había advertido al Canciller de esta posibilidad.[4]
Ese mismo día, Scipio fue invadido por una armada Separatista, destruyendo un destacamento de la República y atrapando a la Senadora Amidala en el planeta. Al quedar claro el engaño de Clovis, el Canciller Palpatine convocó una sesión de emergencia del Senado, donde reveló que Clovis era efectivamente una marioneta de Dooku y que Scipio estaba bajo una invasión. En medio de la conmoción del Senado, Robb hizo avanzar su cápsula repulsora y declaró que la República tenía que detener a la Confederación y asegurar Scipio.[25] Aunque fuera de la línea de sus posiciones pacíficas del comienzo de las Guerras Clon, Robb se mostró decidida en su exigencia de un contraataque, que recibió un fuerte apoyo de sus colegas,[4] con Tills y Mot-Not-Rab manifestando su aprobación. Acatando el consenso del Senado, Palpatine declaró que la República iniciaría una «misión humanitaria» en Scipio, lo cual Robb aplaudió con entusiasmo. Siguiendo las órdenes de Palpatine, una flota de la República liderada por el General Skywalker se dirigió a Scipio.[25]
En lugar de entrar en combate, el bloqueo orbital de Dooku huyó de Scipio, abandonando a sus unidades restantes en la superficie del planeta. Mientras el ejército de Skywalker liberaba con éxito Scipio de las fuerzas Separatistas restantes, Clovis se suicidó. Tras el éxito de la operación militar y el regreso de Skywalker con la ahora liberada Amidala, el representante del Clan Bancario, Nix Card, declaró ante el Senado que los bancos culpaban a Clovis de su inestabilidad y anunció que el Clan Bancario cedía formalmente el control de sus bienes y posesiones a la Oficina del Canciller Supremo. A su vez, Palpatine declaró que había aceptado la oferta, razonando que era responsabilidad de la República mantener los bancos fuera del control Separatista. Palpatine prometió que reinstauraría los bancos a su estado anterior una vez terminadas las Guerras Clon, lo que se ganó los elogios de muchos en la cámara, incluida Robb, que se unió al Canciller para corear: «Larga vida a los bancos».[25]
Legado y conexiones[]
Poco después de la crisis bancaria y de la Batalla de Scipio, las Guerras Clon llegaron a su fin con el colapso del liderazgo Confederado y la transformación de la República en el Imperio Galáctico, con el Canciller Palpatine declarándose a sí mismo Emperador Galáctico,[10] parcialmente empoderado por los senadores inconscientes que le otorgaron poderes cada vez mayores, incluida Robb, que no pudo predecir el futuro y estaba ciega ante las intenciones de Palpatine al nacionalizar el Clan Bancario.[4] Para el 18 ABY,[26] Robb ya no servía como senadora de Taris,[27] una posición ocupada ahora por la tarisiana Tynnra Pamlo, una crítica del Emperador Palpatine y su gobierno autoritario. Como senadora, Pamlo llevó un collar que compartía su nombre con Kin Robb, el Amuleto de los Robb.[28] Pamlo sirvió en el Senado Imperial hasta la disolución del congreso[29] en el 1 ABY.[10]
Tras la conclusión de la Guerra Civil Galáctica en el 5 DBY, la Alianza para Restaurar la República, encabezada por Mon Mothma, derrotó al Imperio y estableció una Nueva República, completa con un renovado Senado Galáctico. Para el 28 DBY,[10] Taris era uno de los mundos miembros de la Nueva República y estaba representado por Andrithal Robb-Voti,[30] que compartía nombre con su homóloga de la época de las Guerras Clon. Igual que Kin Robb, antaño bien reconocida por su ropa de colores brillantes,[4] Robb-Voti vestía con túnicas púrpuras, los colores administrativos tarisianos. Robb-Voti sirvió hasta la destrucción de la Nueva República[30] en el 34 DBY.[10]
Apariciones[]
- Star Wars: The Clone Wars — «La Bestia Zillo Contraataca»
- Star Wars: The Clone Wars — «Traición en el Senado»
- Star Wars: The Clone Wars — «El Complot de Mandalore»
- Star Wars: The Clone Wars — «Viaje de Tentación» (Primera vez identificado como Kin Robb)
- Star Wars: The Clone Wars — «Duquesa de Mandalore»
- Star Wars: The Clone Wars — «Corrupción» (Aparece en retrospectiva(s))
- Star Wars: The Clone Wars — «Planes Malignos»
- Star Wars: The Clone Wars — «Rehenes» (Primera aparición)
- «Hostage Crisis»—The Clone Wars: Historias de Luz y Oscuridad
- Star Wars: The Clone Wars — «A la Caza de Ziro» (Aparece en retrospectiva(s))
- Star Wars: The Clone Wars — «Perseguir la Paz»
- Star Wars: The Clone Wars — «Asesinato Senatorial»
- Star Wars: The Clone Wars — «El Jedi Equivocado»
- Star Wars: The Clone Wars — «El Ascenso de Clovis»
- Star Wars: The Clone Wars — «Crisis al Corazón»