La Campana es el nombre por el que se conoce a esta formación rocosa. La madre naturaleza ha ido erosionando la piedra hasta darle este singular aspecto, en mi opinión, bastante curioso. Situada en las Islas Cíes. Las islas Cíes son un paraíso cercano rodeadas de arena blanca, agua cristalina y rebonsantes de biodiversidad. Son un lugar de obligada visita, si se deambula por tierras gallegas. Tuve la suerte de estar allí antes del chapapote.
La secuoya es un árbol de hoja perenne muy longevo (entre 2.000 y 3.000 años) y el más alto del mundo, llegando a alcanzar más de 125 m de altura y 7 m de diámetro en su base. La secuoya roja más vieja tiene alrededor de 2.200 años; muchas otras exceden los 600 años. Su hábitat natural, que se encuentra en sistemas montañosos bastante húmedos y crecen en grupo, resguardándose de fuertes vientos y heladas, se circunscribe a una estrecha franja del oeste de Estados Unidos que abarca desde la zona meridional de Oregon hasta California central donde se la encuentra tanto en zonas llanas como en las húmedas de las colinas costera. Fue introducida en Europa en 1843 y hoy en día es popular en parques europeos dado su alto valor ornamental. En España podemos encontrarlas en la provincia de Granada, concretamente en el Cortijo de la Losa, ubicado en la Sierra de la Sagra a unos 23 km de Huéscar, existen dos grupos de unos ocho o nueve ejemplares cada uno y una sola, están todas valladas pero se pueden ver a escasos 30 m. Los lugareños también las llaman Mariantonias, posiblemente en alusión a su nombre científico Wellingtonia. Es impresionante ver estos majestuosos y espectaculares árboles en un ambiente distinto al de su hábitat natural. Y la pregunta que uno se hace ante ellos es ¿cómo es posible que estén aquí?