Un varag de tercera edición.
Los varags, también llamados rastreadores de sangre, eran una especie de goblinoide salvaje.
Descripción[]
Los varags parecían hobgoblins con rasgos bastante primitivos y peludos, así como dos cuernos que se curvaban hacia fuera del cráneo. También tenían patas traseras de doble articulación. Los Varag pesaban unos 150 kg (320 lb) y medían 2,1 m (7 pies) en posición vertical; cuando estaban agachados a cuatro patas, como solían hacer, sólo medían entre 0,91 y 1,2 m (3-4 pies) hasta el hombro.
Personalidad[]
Los varags eran criaturas primitivas, casi salvajes e impulsivas, sin capacidad de planificación. Eran afectuosos con los hobgoblins, ya que estaban acostumbrados a ser alimentados por las especies más inteligentes, pero mostraban una intensa devoción por cualquiera que los alimentara regularmente. En combate y durante la caza, los varags eran feroces y astutos.
Habilidades[]
Los Varag eran excepcionalmente rápidos y resistentes, pero necesitaban una gran cantidad de comida para mantener estas características.
Combate[]
Los Varag eran más que capaces de actuar con sigilo y preferían acercarse sigilosamente a los enemigos siempre que fuera posible, para luego precipitarse en el combate cuerpo a cuerpo con su velocidad. Sin embargo, odiaban el combate en formación y tendían a dispersarse por los campos de batalla para acabar primero con los enemigos derrotados. Cuando se enfrentaban a líneas enemigas duras y bien organizadas, empleaban tácticas de golpear y huir, pero preferían atacar a los enemigos con menos blindaje.