Unos frascos de cristal reciclados, el cajón de las puntillas, un poco de entredós de arpillera y cintas y restos de otros adornos navideños.
Lo mejor de todo, hacerlos con mi hija María, disfrutamos de lo lindo las dos juntas.
Por dentro pusimos unas piedrecitas para que pesaran más y sujetasen bien las velitas.
Ya veis que ha sido simple
El pegamento de termofusión ayuda mucho en estos trabajos
Aquí se ven bien las piedrecitas con las velas
Esto ha sido todo, tengo el blog un poco abandonado pero no me da la vida para más. Os deseo un Feliz Año 2018 a todos los que me leéis.