OPINAR EN ESTOS TIEMPOS

 En estos días inciertos

no me voy a afligir

es tiempo de compartir.

Parece que todo se tambalea

pero puedo pararme y sentir

lo conseguido y lo que he dejado ir.

Adiós al viejo año

salve al que ha de venir

arropada por flamantes deseos

prefiero sonreír.

¡FELICES FIESTAS!

Me encanta esta fotografía. Hay veces en que una imagen habla por sí sola. 

Me recuerda a mi gatita cuando se acerca y me da una cabezada rotunda y zalamera a la vez, sin mediar sonido alguno, su delicado contacto lo dice todo.

Siempre me han llamado la atención los testimonios de personas que salen adelante tras un accidente grave o una enfermedad con mal pronóstico y relatan que su vida ha cambiado a mejor y que ven las cosas de forma diferente.

Me siento parte de algo grande,

ligada al alma de las personas que amo

y a la familia que somos todos los que habitamos este planeta.

Ocurren a veces cosas curiosas

y se puede ganar confianza en los tiempos difíciles,

pues tras la contracción inevitablemente llega la expansión

es la ley que siempre se cumple en este mundo cambiante.

A veces trato de apreciar los hilos que se entretejen

entre las personas, a nuestro alrededor

no estamos aislados, es una ilusión.

Como en un mar revuelto, subimos y bajamos crestas

cada uno como buenamente puede

a veces nos dejamos mecer y confiamos

otras nos resistimos y sufrimos

pero siempre avanzamos con la nueva ola

la vida no se detiene.

A todas las almas bellas que me acompañan

en este camino que es la vida  y en el enorme mar que es la red

les envío un millón de besos y un millón de abrazos

que todo lo bueno de la vida

anide en vuestro corazón.

Ayer hice un descubrimiento muy amargo sobre la influencia de algunos contenidos de internet en mi hija. Desde hace tiempo vengo observando que cuando se conecta por entretenimiento a la red su comportamiento cambia, se pone a la defensiva como por arte de magia.

En una entrada del blog de Joselu, Profesor en la secundaria, empecé a dar forma a los problemas de comportamiento que se dan en mi hija. Hay un comentario muy revelador en el que se da testimonio del mundo que hay al alcance de niños y adolescentes del que muchos no somos conscientes. Tirando del hilo, hay modas propiciadas por youtubers y otros desconocidos que no dan la cara, que incitan a nuestros hijos a rebelarse sin motivo, a ser crueles, incluso hay técnicas para crear tensión y observar divertidos el resultado del experimento.

He podido ver como mi hija, que hace menos de dos años era una persona noble y de buenos sentimientos, ha cambiado sus valores y en consecuencia su comportamiento. En casa, en los últimos meses, se ha vuelto un elemento distorsionador y su conducta nos genera malestar a mi marido y a mí constantemente. Pensaba que era responsabilidad mía, algo que no estaba haciendo bien. He buscado sin descanso el motivo de ese cambio, me he analizado a fondo, he tratado de analizarla a ella... y al fin creo tener claro que el motivo por el que se comporta de esa forma no tiene nada que ver conmigo, yo sencillamente soy el campo de pruebas de un juego absurdo y cruel. Ayer de noche, en un trabajo que hizo para la asignatura de Lengua que se titulaba algo así como "atacar a mi madre" pude leer como describía con todo detalle las técnicas que usa para retarme y como maneja los hilos para hacerme sentir mal.

Escribo esta entrada porque sé que lo que nos está pasando a nosotros no es un caso aislado, me temo que está sucediendo más de lo que cabría pensar. En las conversaciones que tengo con otras madres, noto ese malestar que conozco bien.

No puedo evitar que se conecte a internet porque es una herramienta necesaria en sus estudios, intento minimizar el tiempo que pasa conectada pero aun así no sirve de mucho, dónde no llega ella, cualquiera de su círculo de amistades la puede poner al día.

Tendré que afrontar el problema y empezar a buscar  una salida a esta anormalidad que me deja anonadada, pero al menos ya sé a lo que me enfrento.

Hace 20 años, cuando trabajaba para una compañía que se llamaba Amena, la sala de trabajo estaba llena de cuadros que animaban a la Excelencia insistiendo mucho en ello. Había un trato excelente entre compañeros y cuando hablábamos con clientes para resolver fallos de conexión a la red, el trato también era excelente. Amena fue absorbida por el grupo Orange y esa filosofía de trabajo desapareció. En general, creo que las compañías que ofrecen internet y telefonía hace tiempo que olvidaron esa excelencia y en consecuencia dejaron de tratar bien a sus clientes, se los roban unas a otras y el foco no está en resolver sino en ganar nuevos clientes para engordar las listas de altas en el servicio.

Lo peor de todo esto es que desde hace años las personas hemos ido perdiendo valor. En el mundo laboral que conozco, el compañerismo ahora es mínimo y los clientes solo son números reflejados en papel o en una pantalla.

En fin, dejando a un lado esta anécdota sobre la Excelencia en el trabajo, se puede definir la PNL como el estudio de la Excelencia, no hacia los demás sino hacia nosotros mismos. Se trata de darnos valor, de emponderarnos. Todas las personas somos capaces de hacer cosas increíbles y lo que no nos sale bien, lo podemos analizar e intentar mejorar.

La Programación Neuro-lingüística comenzó en los años setenta con 2 jóvenes, Richard Bandler y John Grinder, que decidieron investigar qué tenían en común las personas que alcanzaban el éxito. La PNL parte de la idea de que nuestro cerebro es similar a un ordenador. A partir de los datos introducidos y el programa que tenemos, podemos procesar, almacenar y actualizar la información cada vez que es necesario. Los datos introducidos son la información sensorial que nos llega, lo que vemos, escuchamos, degustamos, sentimos... todo ello procesado y almacenado en el cerebro. Y cuando una situación se repite, la comparamos con lo que tenemos almacenado y reaccionamos según el sentido que le dimos a determinadas experiencias, nuestro programa.

Si en los primeros años de vida tuvimos una mala experiencia en el agua, por ejemplo, nos costará mucho trabajo aprender a nadar, en nuestro inconsciente habrá un aviso que no nos lo va a poner fácil. Bandler y Grinder descubrieron que a veces hay que "desaprender" y crear una nueva programación, saliendo de aquellos tópicos en los que andamos atascados.

Desde la antigüedad grandes filósofos y pensadores han defendido que no hay una realidad única, que cada persona la percibe de modo diferente según su interpretación de los hechos. Así, en función de lo que hemos vivido, sacamos nuestras conclusiones de cómo es el mundo y creamos una especie de "mapa mental" para orientarnos en la vida. La PNL propone analizar ese mapa, buscar los componentes de algunas conductas y averiguar el motivo por el que hacemos algunas cosas de forma excelente, mientras que en otras nos estrellamos una y otra vez.

La Excelencia en el conocimiento de nosotros mismos es la forma de asegurar una vida más agradable, al eliminar incertidumbre todo cambia a mejor. Deberíamos de olvidarnos de las excusas. Normalmente, las cosas pasan por alguna razón y escudarnos en la mala suerte o echar la culpa a los demás cuando sucede algo que no nos gusta, hace que tropecemos una y mil veces en la misma piedra. Si podemos analizar el porqué de nuestras limitaciones, estamos a un paso de acabar con ellas. Visto así, no nos queda otra que intentar observar lo que nos desagrada y además se repite cíclicamente y tratar de cambiar ese programa que nos perjudica.

A continuación dejo un vídeo sobre la PNL que me ha gustado mucho.