Distribución (automóvil)
Apariencia
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En los motores de combustión interna, la distribución es el mecanismo encargado de regular la entrada y salida de fluidos en el cilindro.[1] Generalmente se trata de un conjunto de piezas que, accionadas por el mismo motor, abren y cierran las válvulas de entrada y salida de gases, a través del movimiento del o los ejes de levas que, de igual manera, son accionados por el cigüeñal con conjunto la correa de distribución.
Componentes
[editar]El sistema consta de una serie de piezas que pueden variar dependiendo del motor. Generalmente podemos encontrar:
- Engranaje de mando, cadena o correa: Se encuentra conectado al cigüeñal. Recibe el movimiento de este y lo transmite al árbol de levas. Los engranajes de mando solamente se encuentra en los vehículos antiguos o con grandes motores, porque son menos eficientes que las cadenas y correas, ya que pierden energía en forma de calor.
- Árbol de levas: Es un eje con protuberancias, llamadas levas, que al girar activan en su momento justo el taqué. Debido a las condiciones que debe soportar lleva un tratamiento térmico especial llamado cementación.
- Taqué o botador: Es un empujador que, movido por el árbol de levas, empuja la válvula. Pueden ser mecánicos, comunes o con un regulador de la luz de válvula o hidráulicos, que regulan la luz de válvula automáticamente.
- Válvula: Es la parte fundamental del sistema. Accionada por el botador, se abre o cierra permitiendo el paso de los gases al cilindro.[1][2]
Referencias
[editar]- ↑ a b Arias-Paz, Manuel (2004). «2». Manual de automóviles (55ª edición). Madrid: Dossat 2000. ISBN 84-89656-58-4.
- ↑ «Concepto y ventajas de la distribución por cadena». Universidad Complutense de Madrid.
España.