Luciano Sívori, escritor y dueño del blog Viajar Leyendo: críticas express , tan interesante como variopinto, me envío muy amablemente su segunda novela editada, "El Alma Dividida". Luego de leerla necesitaba hacerle algunas preguntas. Acá van:
*Por tu blog fui
sabiendo de tu viaje a España. ¿Cómo llegaste a editar en Cuanto Te Quiero?
¿Cómo fue tu experiencia en el concurso “Vuela La Cometa”?
Cuando empecé a sentirme un poco más confiado con
mis escritos, comencé a probarme en concursos literarios. Hay de todo, los hay
chiquitos, más grandes, con premios monetarios o no, con envío por carta o por
e-mail, locales, internacionales. Lo cierto es que probé un poquito con cada
uno y me sorprendí al darme cuenta que estaba ganando premios por algunos cuentos.
El paso siguiente, y lógico, fue enviar
mi segunda novela, “El Alma Dividida”. La primera ("Un Verano para Recordar") la había publicado con muchísimo
esfuerzo con una editorial local (EdiUNS, Bahía Blanca), y quería que la
segunda pudiera tener un poco más de impacto y difusión.
A “El Alma Dividida” la presenté en varios
concursos, incluyendo algunos grandes como Planeta o Clarín. Un día me llamaron
los organizadores de “Vuela la Cometa”, un concurso internacional en Tarragona,
España. Mi novela era finalista con otras dos. Si quería, podía viajar al
evento y me pagarían el avión y el hotel. ¿Cómo no hacerlo?
En el evento conocí a muchísima gente y pasé una
noche de nervios porque el ganador del primer premio (2.000 euros +
publicación) se anunciaba al final de la noche y por un sistema de puntajes.
Finalmente mi novela quedó segunda. Sin embargo, almorzando con los
organizadores esa noche (que también llevan adelante la editorial “Cuanto te
quiero”) me dijeron que mi novela les había gustado mucho y que, de todas
formas, querían publicarla.
Así que tuvimos algunos intercambios de e-mails
para revisar algunas cuestiones de estilo y forma y finalmente salió publicada.
La experiencia en Tarragona fue increíble. Viajé
solo, hablé con muchísimas personas, conocí historias de vida y finalmente me
llevé algo con lo que sólo todos los escritores sueñan: ver su obra en papel,
en las estanterías, publicada y disponible para todo el mundo.
*Lo primero que sentí al leerla es una
descentralización geográfica, un continuo viaje que, supongo, tiene mucho que
ver con tu lugar en el mundo, ¿donde vivís? ¿Dónde viviste? ¿En qué lugar te
criaste?
Sí, los viajes son un motivo fundamental en mis
novelas y también lo son en mi vida. Mi primera novela (“Un verano para
recordar”) ocurre en Puerto Madryn y en Neuquén. Esta segunda: en Necochea y en
Neuquén. La tercera, que terminé de escribir y estoy editando, tiene lugar
tanto en Bahía Blanca como en los refugios de montaña de El Bolsón. Hasta ahora
viene siendo mi obra favorita y le tengo fe.
Vivo en Bahía Blanca desde que me vine a estudiar
en la universidad en el 2006. Sin embargo, soy de Neuquén. Viví todo un año en
Panamá, donde trabajé 6-7 meses en el país y otros 2-3 meses viajé por
Centroamérica.
Si mi vida hubiese tomado otro rumbo (es decir: si
no hubiera conocido a mi mujer, a quien amo, y hubiésemos formado una familia)
probablemente seguiría vagando por el mundo. En enero me voy solo a conocer el
norte argentino. Por más que me sea cada vez más difícil, quiero seguir
viajando en la medida de lo posible.
En la novela aprovecho la temática del viaje para
hablar de otras cosas, esta idea de encontrarse a sí mismo, del retorno al
hogar, el viaje como pasaje de la niñez a la adultez, como escape, como salida
de la zona de confort. Siempre escucho la gente que dice “amo viajar”. En
realidad, aman estar en otro lugar fuera de su lugar. El viaje en sí, el
transitar rutas, pasar horas arriba de autos, colectivos, aviones, el traslado
en sí mismo, a nadie le gusta. A mí sí, me encanta. Son oportunidades únicas
para encontrarse a solas con uno mismo, para leer sin distracciones, sin
tecnología, con el paisaje del mundo como testigo.
*Conociéndote por este medio, se que en la
novela no hay demasiado de autobiográfico, al menos no directamente, pero
algunos detalles o huellas de vivencias propias vas dejando ¿qué porcentaje de
autobiografía o tal vez de personajes cercanos a vos tiene el libro?
Una vez escuché que Stephen King comentaba que uno
comienza escribiendo su propia vida en los libros, disfrazada, claro. Y que
luego se va separando de esos elementos personales a medida que progresa. Yo no
sé qué tanto me pude separar, porque mis novelas siguen teniendo un componente
autobiográfico fuerte.
La primera novela era mucho más personal, pero “El
Alma Dividida” tiene mucho de mí también. En algún punto, Alberto Arias es el
alter-ego de algo que me gustaría haber sido. Yo toco la guitarra, tengo gustos
musicales similares, soy muy reflexivo como él, soy de Neuquén, viajé por el
mundo, etc. Incluso, algunas de sus anécdotas me pasaron a mí (como una que se
menciona en el segundo capítulo respecto a una flaca que era una histérica,
llorona, y me fui dejándola plantada).
Sin embargo, sí, como decís vos, esta novela no se
caracteriza tanto por tener huellas de mis vivencias. Si tuviera que tirar un
%, está más cerca del 10% que del 90%.
*Hay mucho de misterio, de policiales, de
cine negro y series urbanas, hay algo de libros de aventuras… ¿Cómo definirías
al libro?
Me gusta pensarlo como un drama con toques de
policial negro. La parte policial comienza a hacerse evidente cuando el libro
llega a la mitad y aparecen los verdaderos villanos de la historia. Pero sí,
como decís vos, hay una mixtura importante.
Existe un misterio, hay aventuras, hay drama
psicológico. Una vez un compañero escritor, con muchas más experiencia que yo,
me dio un consejo invaluable que me guardo siempre. Me dijo: “Escribí de
aquello de lo que te gustaría experimentar a vos mismo como lector”. Parece
sencillo, pero tiene mucho de verdad. Yo soy mi primer lector, y quiero
engancharme, sorprenderme con mis propios escritos. Por eso escribo suspenso,
policiales, misterio, aventuras. Son los géneros que yo mismo sigo a nivel
lector.
Al respecto, amo la ciencia ficción también, y
tengo cuentitos del género, pero no me animé a llevar adelante una novela de
sci-fi todavía. El género tiene sus reglas y es muy difícil. Todavía le tengo
un poco de miedo.
*Las influencias literarias directas de “El
Alma…” las encuentro en el Dr. Jekyll de
Stevenson pero también en el Dostoievski de El Doble, Los Hermanos Karamazov o
Los Demonios. Incluso una de las frases que más me impactó –“A veces me siento
como si tuviera un par de lobos peleando dentro de mi corazón…”- pareciera de
Fiodor. ¿Qué otras influencias podés
mencionar?
Sí, totalmente. La influencia de Stevenson es
demasiado evidente, motivo por el cual quise mencionarla directamente en la
novela. La psicóloga le hace leer el libro al protagonista y se refiere
directamente a la similitud de su situación. Creo que es la piedra fundacional
de cualquier historia con doble personalidades. Leí a Dostoievski (Los Hermanos
Karamazov es eterna, y muy disfrutable) pero me sorprendiste con esa
referencia porque no lo tuve presente nunca.
Creo que el escritor es una bolsa de sus propias
experiencias, sus lecturas, sus intereses. Es claro que en “El Alma Dividida”
metí un poco de todo eso. Hay algunas escenas que las escribí con Tarantino en
mente, por ejemplo todo el capítulo en el taller del padre de Alberto. Como
intertextualidad también está la idea de Odiseo, el héroe griego, y mi hermano
Tomás destacó que la trama le recordaba mucho a una película con Kevin Costner
(Mr. Brooks. Yo la vi, pero no la tuve en mente tampoco, ¡por lo menos no a
nivel consciente!).
A mí me gusta creer que hay algo del maestro King
en el relato, especialmente en relación a Beta, cómo acosa al protagonista, sus
apariciones fantasmales. Sin duda es el elemento más sobrenatural de la
historia, y en algún punto me sonaba también al payaso Pennywise de IT.
El tema del alcoholismo en el padre de Alberto es
también una referencia directa a King, quien sabemos escribió muchas de sus
novelas hablando secretamente sobre su problema. Algunos de los pensamientos de
Lucio son muy parecidos a las experiencias con el alcohol que cuenta King en su
autobiografía “Mientras escribo” (por ejemplo, la idea de desesperarse cuando,
en un restaurant, veía que un tipo no se estaba terminando su vino).
*La filosofía, sociología y la psicología tampoco
escapan entre las inquietudes del libro. Hay mucho existencialismo y algo del
eterno retorno. Las inquietudes de tu personaje Alberto (lo voy a afirmar yo
que suelo visitar tu blog) son inquietudes constantes en tu vida. ¿Cuáles son
tus principales inquietudes, tus gustos, tus “vicios”? ¿Cómo es el Mundo de
Luciano?
Sí, absolutamente hay algo nietzscheano en “El Alma
Dividida”. Si bien no puedo considerarla una novela filosófica, varias
temáticas empapan a la trama. Yo soy una persona que se cuestiona mucho todo,
pienso (flasheo, si querés) mucho en mi existencia. Me gusta hacerme preguntas
más que buscar responderlas y soy muy inquieto internamente (en mi mente) como
por fuera. Mi cerebro está siempre acelerado, incluso cuando duermo.
Mis gustos y vicios son varios. La gran mayoría los
fui plasmando en el blog: animé, viajes, cine, literatura, filosofía, cómics
(Batman, por sobre todo), videojuegos (retro, por sobre todo). Escucho mucha música en inglés y canto
fuerte frente a todos, aunque moleste y, aunque no se transmita directamente en
el blog, más antisocial que social. Es decir: no tengo problema en hablar de lo
que sea con cualquiera, pero si me aburrís con tu charla, me voy. Me aburro
fácil, de hecho. Prefiero estar solo (la paso muy bien conmigo mismo) que
rodeado de gente que no me interesa en lo más mínimo. Tiendo a lo pragmático.
Estoy en contra de la psicología. Me considero apolítico y no creo en Dios.
Rara vez leo las noticias. Vivo, si se quiere, en un mundo de burbuja más que
la persona promedio (en esto tengo muchas similitudes con Alberto). Igual que
Alberto, soy bastante nostálgico. Muchas veces me encuentro a mí mismo
rememorando el pasado, preguntándome qué fue de los días en los que tenía más
amigos, más historias, más aventuras. Soy más racional que emocional, río
muchísimo más de lo que lloro, pero pienso mucho más de lo que hago realmente.
Mi mundo es volátil, en constante conflicto con
lo que soy y lo que quiero ser. Sé que
estoy cada día más cerca de la persona en la que me quiero convertir (me
interesa mucho la docencia universitaria –soy docente de dos materias de
Ingeniería Industrial, ah, porque soy Ingeniero Industrial, jaja). Me gustaría
poder vivir de la literatura. Quiero tener más tiempo para estar con mi hijo,
para poder jugar videojuegos, para poder viajar. Quiero poder vivir con menos
plata, pero que al mismo tiempo no me falte nada. Hay días que quiero tirar a
la mierda mi laburo de oficina de 8 a 5, pero también lo agradezco porque me da
cierta estabilidad económica.
En fin, como ves, soy un manojo de nervios, de
tensiones internas. Supongo que todos somos un poco así. El blog, en algún
punto, es una de mis tantas válvulas de escape. Un espacio donde puedo ser yo
mismo, escribiendo de lo que quiero, compartiendo lo que me interesa.
*Otra cuestión fundamental de tus personajes
y situaciones es la mención de música, incluso hay un planteo filosófico acerca
de la importancia del silencio o las pausas. Por ahí andan Pink Floyd, Red hot…
No son elecciones casuales ¿cierto?
¡Bien ahí con esto! Ya son varios los que leyeron
la novela e identificaron un leitmotiv como el silencio vs. la música. Por
ejemplo, Alberto escucha mucha música para tapar las voces en su cabeza, Beta
es una segunda personalidad insufrible que se la pasa diciendo chistes de mal
gusto y malas palabras. (Ahora veo que hay una similitud importante con la peli
“Baby Driver” de Edgar Wright, pero che, ¡mi novela fue primero!)
Yo lo identifiqué sólo mucho después, cuando hacía
revisiones. Soy de los que creen que uno tiene que ir escribiendo y los
simbolismos van a ir llegando solos. Para mencionar de nuevo a King, un maestro
para mí aunque él no lo sepa, él decía que se dio cuenta que había colocado un
simbolismo importante con el color rojo en “Carrie” cuando su editor se lo
mencionó. Son procesos inconscientes. Acá me pasó igual.
No hay elecciones casuales ahí. Todos los temas que
se mencionan estuvieron pensados. Yo soy de imaginarme la novela como una película,
y las escenas donde mencioné temas, las musicalicé inmediatamente. Por ejemplo, la escena en la que entran los
malos y Beta le pide un tema a Alberto, un tema “adecuado”. Finalmente van con Paint it Black (“I see a red
door and I want to paint it black…”). Capítulos después, Alberto encuentra a su hermano detrás de una puerta
roja. Cuestiones así abundan en la historia.
Y
sí, todos los temas son míos también. Música que me encanta.
*¿Qué canción recomendás para que suene luego
de esta pregunta? ¿Sympathy for the Devil? ¿Alguna de Blood Sugar Sex Magic?
Emmm…
vamos con una que es de mis temas de cabecera para viajes en auto, y que va muy
bien con la novela: “Carry on wayward son”, de Kansas.
*¿Cómo te sentís ahora con “El Alma
Dividida”, publicada? ¿Qué reacciones recibiste de los lectores?
Mirá, es una sensación rara. Por un lado estoy
feliz sabiendo que la novela puede adquirirse en papel. Aunque, por otro, la
novela se editó en España, y es allá adonde se distribuye. Yo tengo algunas copias
que me mandó la editorial, pero lo cierto es que es una novela muy argentina y
mis amigos, familiares o lectores argentinos no pueden tenerla fácilmente.
Estamos hablando con la editorial para ver qué
posibilidades existen de traerla acá. Todo depende de cómo le vaya allá.
También me da un poco de desconfianza el hecho de que la editorial es muy
nueva, muy “novata”, si se quiere. Le han puesto mucho corazón a la
publicación, pero les falta impulso para saber cómo llevarla. La distancia no
ayuda.
Reseñas oficiales en blogs o medios todavía no he
tenido la suerte de recibir (quizás seas de los primeros). Yo envié una copia a
algunos blogueros amigos y le pedí a la editorial que envíe copias a algunos
blogs de reseñas literarias que sigo en España. Aún no he tenido la fortuna de
leer algo respecto a mi obra.
Sí, a nivel informal, gustó mucho, por suerte.
No es una historia perfecta, pero creo que toca
algunos temas contemporáneos fuertes, es una aventura llevadera y tiene buenos
momentos de acción y suspenso. Es una novela que yo leería y disfrutaría, y los
lectores me han dicho eso mismo también. Obviamente que a mis amigos y
familiares les encantó, pero ese tipo de críticas nunca me terminan de llenar
porque es medio obvio que van a decir eso, jajaja.
*¿Qué escritores contemporáneos recomendás?
La cuestión es qué considerar “contemporáneos”,
jaja. Yo leo mucho y muy variado. Eso queda evidenciado en el blog, donde mis
reseñas literarias puentean entre varios géneros. El problema es que no tiendo
a leer a un solo escritor de forma violenta. Es raro que lea más de dos obras
de un mismo autor en un periodo corto de tiempo. Hay gente que se copa con
Murakami y se lee todos sus libros. Yo leí dos hasta ahora, y me gustaron
bastante. Estoy por comenzar otro.
Quedo re pesado, pero King sigue siendo un escritor
fuerte, y quizás el más importante de nuestra época. Me gustó mucho, por
ejemplo, su novela “Joyland”. Este es el segundo año que leo una de “La Torre
Oscura”. En enero creo que encaro la tercera parte. Stephen King es el autor
que más leí, sin duda, unas ocho, nueve o diez novelas…
Hace poco tuve la posibilidad de leer “Madagascar”,
del argentino Luis Benítez, y la disfruté un montón. Desconozco el resto de su
obra, pero ésta es una aventura de piratas que te lleva de vuelta a la
infancia, a historias como “Un capitán de quince años” y “La Isla del Tesoro”.
Todavía no leí algo de Mariano Pereyra que no sea
maravilloso. Es un escritor argentino. En el blog reseñé una antología de
cuentos hermosa y su novela “Escorpio”.
En el ámbito local –de nuevo, no sé si
considerarlos contemporáneos– tengo un cariño especial por Bioy Casares, quizás
el escritor con la bibliografía más perfecta, César Aira (genio total), Manuel
Peyrou (un escritor argentino fascinante que la historia parece haber olvidado)
y Cortázar. Me gusta Borges, claro, pero no lo tengo en un pedestal como la
mayoría.
Por último, te menciono a Kurt Vonnegut. Su novela
“Cuna de Gato” me voló la cabeza, y según he leído, toda su obra es impresionante.
Quiero poder leer más de él.
*¿Se vendrá otra novela? ¿Cuáles son tus
próximos proyectos como escritor?
Se viene, se viene. No quiero dar muchos detalles
porque la estoy terminando de revisar y ya la mandé a algún que otro concurso.
Es una historia muy loca porque el protagonista es, ahora, una chica. En
general pongo a hombres de protagonistas, por lo que esta nueva novela fue un
desafío gigante. Nuevamente, los viajes tienen un rol fundamental. De nuevo, no
puedo dar muchos detalles (#misterio).
Ahora en diciembre se publica “The Final Analysis”,
un cuento policial mío, en la revista Ellery Queen Mistery Magazine. Esta es
otra historia loca, de esas que me ocurrieron gracias al blog. Resulta que en
esta nota hablé de uno de mis relatos favoritos de todos los tiempos:
“Invitación a un crimen”:
El autor, un tal Josh Pachter en EEUU, leyó la nota
y me agradeció mis palabras (habla bien castellano). Estuvimos intercambiando
e-mails y él me invitó a escribir para la EQMM. Tenía un cuento en mi cabeza,
que es el que le terminé presentando. La novedad fue que se convirtió en mi
primer relato escrito en inglés (si bien yo hablo bien inglés, Josh me ayudó
con la traducción, porque escribir literatura en inglés es otra cosa).
Finalmente, la EQMM me compró el relato, y ahora
finalmente se publica. Es un pasito chiquito, pero emocionante.
Luego tengo otras muchas historias escritas que
estoy queriendo publicar de algún modo. Me gustaría poder armar una antología
de cuentos para alguna editorial importante. Tengo suficientes textos para
hacer algo más o menos grande. Muchas de mis mejores historias (en mi opinión)
están guardadas en mi PC, a la espera de que algo les pase. El objetivo de
estos próximos meses es lograr hacer algo más con ellas.
En el medio sigo enviando cuentitos a concursos y
me llena de satisfacción saber que sigo ganando algún que otro premio. El
trabajo de escritor es muy solitario, y son estas cuestiones (ir a una entrega
de premios, ser reconocido como escritor, intercambiar experiencias con otros
del medio) las que vuelven al trabajo algo más social.
Justamente, este finde viajé a Necochea para
recibir un premio por una segunda mención de honor.
*¿Cómo puede adquirir "El Alma Dividida" quien esté leyendo
esto, de una manera diferente a la mía, y por lo que tanto te
agradezco?
Los que viven en España la tienen más fácil, porque
está disponible en muchas de las librerías más importantes del país. Sé que
también se puede pedir por Internet, en sitios como Amazon, Agapea, etc. La
otra opción es contactarse con la editorial (
http://cuantotequiero.es/libros/el-alma-dividida/)
o conmigo a mi correo electrónico, y yo veo qué puedo hacer (
lucianosivori@gmail.com)
Más información en este link: