Ir al contenido

Amado Balmes

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Amado Balmes Alonso
Información personal
Nacimiento 7 de noviembre de 1877
Zaragoza
Fallecimiento 16 de julio de 1936
Las Palmas de Gran Canaria
Nacionalidad Española
Información profesional
Ocupación Militar Ver y modificar los datos en Wikidata
Años activo 1897-1936
Lealtad Reino de España
República Española
Unidad militar Ejército de Tierra
Rango militar General de brigada
Conflictos Guerra del Rif
Distinciones

Amado Balmes Alonso (Zaragoza, 7 de noviembre de 1877-Las Palmas de Gran Canaria, 16 de julio de 1936)[1]​ fue un militar español que alcanzó la graduación de general de brigada y prestó valiosos servicios durante la guerra del Rif. Su muerte accidental, inesperada y sorprendente, un día antes del inicio de la Guerra Civil Española ha generado cierta polémica en la historiografía española puesto que facilitó el traslado oficial del general Franco a Canarias.

Biografía

[editar]

Perteneciente a una distinguida familia de larga tradición y raigambre aragonesa, era descendiente del gran filósofo Jaime Balmes. Asistió al Colegio de los Padres Escolapios de Zaragoza al igual que el fundador de la legión, José Millán Astray.[2]

Ingresó en la academia de Infanteria el 7 de febrero de 1897. Terminado sus estudios el año 1900, es promovido a segundo teniente; a primer teniente en julio de 1903; a capitán en junio de 1908; a comandante por méritos de guerra en noviembre del 14; a teniente coronel en febrero del 23; a teniente coronel en octubre de 1925; y a general en octubre de 1927.

Prestó en la guerra del Rif valiosos servicios al mando de varias unidades, entre ellas la primera legión del Tercio, que le valió el ascenso de teniente coronel a coronel en febrero de 1926. Como coronel fue destinado a la segunda media brigada de Cazadores de Tetuán. Al frente de estas fuerzas destacó en las últimas operaciones que precedieron a la rendición de Abd-el-Krim. En una de esas operaciones se apoderó de 41 cañones, varias ametralladoras y diverso material de guerra, un hecho notable de guerra que lo elevó más si cabe entre los más destacados militares africanistas. Todos sus ascensos fueron por méritos de guerra tomando parte de las campañas más destacadas de Marruecos. Siendo Coronel de Infantería, en octubre de 1927 es promovido al empleo de General de Brigada por los méritos de campaña contraidos por su brillante actuación durante la toma de Alhucemas durante los meses de octubre de 1926 y 1927. [3]​ En octubre de 1927 es destinado a la 2ª Brigada de Cazadores de Tetúan. [4]​El 10 de diciembre de 1927, Alfonso XIII le concede una extensa audiencia militar junto a un grupo de generales.[5]​ El 21 de diciembre de 1927, sus compañeros de la 5ª promoción de infantería le agasajan con un banquete en el elegante y selecto restaurante Spiedum (aparato que en Ámerica se utiliza para asar carnes y aves) [6]​de Madrid, a la hora del champán ya en el postre, Balmes fue honrado con la inesperada presencia de su majestad, acto que fue recogido con una inolvidable ovación.[7]​El 3 de enero de 1930 es recibido en audiencia por su Alteza Real el Príncipe de Asturias. [8]​Unas semanas más tarde, el 8 de marzo de 1930, el general Amado Balmes es nombrado Jefe Superior de Aeronaútica sustituyendo al general Kindelán.[9]​ El 23 de mayo de 1930 le es concedida la Gran Cruz de San Hermenegildo. [10]​ Durante su periodo de jefe aeronaútico sufrió un comentado accidente aéreo cuando se disponía a pasar revista a las fuerzas aéreas de Rio Oro. Habiendo salido de Cádiz con dirección a la Guinea española cayó al mar a dos millas de Ceuta, permaneciendo tres horas aislado hasta que fue recogido por una embarcación pesquera.[11]​ El 7 de noviembre de 1930 es recibido nuevamente en audiencia militar por el rey Alfonso XIII. [12]​El 9 de enero de 1931, el general brigadier Amado Balmes es cesado como Jefe Superior de Aeronáutica, quedando a la orden del ministro. [13]​Unos dias más tarde, el 13 de enero, es recibido en audiencia por Alfonso XIII. [14]​El 1 de febrero de 1931 pasa a la situación B, del reglamento de Aeronaútica. [15]​En el momento de la proclamación de la Segunda República, como hemos dicho, ya ostentaba el rango de general de brigada.[16]​El 30 de abril es alejado de Madrid, siendo destinado por Azaña a la brigada de Mallorca.[17]​ El 17 de junio de 1931 es nombrado comandante militar de Mahón. [18]

El 24 de octubre de 1931, La Voz de Menorca, publica una carta abierta al ministro de la Guerra, Manuel Azaña. En esa carta abierta dirigida a Azaña, la Federación Socialista y Obrera Menorquina denuncia la hostilidad del comandante militar de Mahón (Menorca), el general Balmes, con la República, acusándolo diréctamente de ser monárquico, no tragar a la República y de querer imponer su acendrado monarquismo a sus subordinados. "Es peligroso para la República que tales borbonistas asuman la máxima autoridad militar en una isla como la de Menorca"; "Sr. Ministro de Guerra: La República ha de ser respetada o ha de ser temida".

Es conocido por su muerte el 16 de julio de 1936 cuando era gobernador militar de Las Palmas, debido a un accidente cuando manipulaba su pistola, para algunos era el comienzo del golpe de Estado.

Al dia siguiente en La Gaceta de Tenerife se hace la primera descripción de los hechos:

"A las 10.30h de la mañana de ayer, el general Balmes, siguiendo su costumbre de otros días, se dirigió a su despacho de la Comandancia Militar, despachando brevemente con el jefe de Estado Mayor; después se trasladó en coche a la batería de San Fernando de La Isleta, donde comenzó a ejercitarse en el tiro de pistola, encasquillándosele la misma cuando apenas había efectuado siete disparos. Tras de varios esfuerzos inútiles para desencasquillar el arma, apoyó ésta sobre el vientre para conseguir mejor su propósito, pero en aquel momento, por un descuido inexplicable, se le volvió la pistola hacia si, al propio tiempo que se disparaba, atravesándole el proyectil parte de la region abdominal. La herida fue calificada desde los primeros momentos de suma gravedad.

Inmediatamente el chófer que había guiado el coche en que se trasladó el malogrado general a dicha bateria, le condujo a la Casa de Socorro, donde viendo los cuatro facultativos la gravedad de la herida, dispusieron fuera llevado sin pérdida de tiempo al Hospital Militar de aquella plaza.

A pesar de haber sido asistido desde los primeros momentos convenientemente por varios médicos y practicantes, a las doce y media de ayer, dejó de existir tras una hora de cruentos padecimientos."[19]

Han salido para Las Palmas, con el fin de asistir al entierro del ilustre general Balmes, Su fallecimiento sirvió al general Franco, comandante militar de Canarias, para desplazarse desde Santa Cruz de Tenerife a Las Palmas y embarcar en el Dragon Rapide con lo que pudo desplazarse al protectorado de Marruecos y encabezar la sublevación que dio inicio a la guerra civil española en las posesiones españolas en África.

La versión canónica sobre las causas de su muerte (que se apoyó la pistola en el vientre para desencasquillarla) fue puesta en duda en 2011 por el historiador Ángel Viñas. En su obra La conspiración del general Franco, Viñas postula que Balmes fue asesinado por orden de Franco debido a su negativa a unirse a la sublevación.[20]​ En una obra posterior y tras una publicación del historiador Moisés Domínguez Núñez en la línea de la hipótesis accidental en 2015, Viñas publicó un nuevo trabajo, El primer asesinato de Franco, en el cual ratifica la versión del asesinato por medio de la refutación de la autopsia de Balmes, con base en errores e incongruencias varias de la misma y a otra información publicada.[21][22]

En una réplica publicada posteriormente a la obra de Viñas, titulada General Amado Balmes: Caso cerrado, Moisés Domínguez Núñez insiste en que la causa de la muerte del militar habría sido, efectivamente, producto de un accidente. El autor basa su escrito a que su obra se basa en "documentos, dossier, informes, testimonios frente a elucubraciones y propuestas inauditas de Viñas más propias de novela negra que del mundo científico-histórico".

Véase también

[editar]

Bibliografía

[editar]

Referencias

[editar]
  1. «Muerte en Canarias del general Balmes». ABC. 17 de julio de 1936. Consultado el 14 de septiembre de 2011. 
  2. «Un héroe zaragozano. El coronel de Infanteria D. Amado Balmes Alonso». La voz de Aragón (Zaragoza). 4 de febrero de 1926. p. 8. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  3. «El rey firma los ascensos de los generales y coroneles que intervinieron durante última etapa de la Campaña de Marruecos.». La Voz de Asturias (1388) (Oviedo). 2 de octubre de 1927. p. 1. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  4. «El general Balmes se hiere involuntariamente falleciendo una hora después». Gaceta de Tenerife (8581) (Tenerife). 17 de julio de 1936. p. 3. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  5. «Audiencia militar». Diario de Córdoba (27522) (Córdoba). 10 de diciembre de 1927. p. 1. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  6. «EL CAFÉ SPIEDUM Y LOS ALMACENES QUIRÓS DE LA GRAN VÍA.». 
  7. «Su majestad el rey en el Spiedum». El Debate (5752) (Madrid). 22 de diciembre de 1927. p. 3. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  8. «Audiencias del Príncipe de Asturias». Ejército y Armada: diario defensor de sus clases activas y pasivas (7807) (Madrid). 4 de enero de 1930. p. 2. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  9. «El general Amado Balmes ha sido nombrado Jefe Superior de Aeronaútica». Correo Extremeño (7586) (Badajoz). 9 de marzo de 1930. p. 1. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  10. «Política, Firma regia». El Defensor de Córdoba (10338) (Córdoba). 23 de mayo de 1930. p. 3. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  11. «El General Balmes en Burgos». El Castellano (9185) (Burgos). 1 de julio de 1930. p. 1. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  12. «Casa Real. Audiencia Militar.». Ejército y Armada: Diario defensor de sus clases activas y pasivas (7870) (Madrid). 8 de noviembre de 1930. p. 1. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  13. «Firma regia». La independencia (7027) (Almeria). 11 de enero de 1931. p. 2. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  14. «Los reyes recibieron diversas visitas. Audiencia regia». La Voz de Asturias (2413) (Oviedo). 13 de enero de 1931. p. 2. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  15. «Notas Políticas». El Cantábrico (13025) (Santander). 1 de febrero de 1931. p. 1. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  16. Federico Bravo Morata (1979); Franco y los muertos providenciales, Edit. Fenicia, pág. 41
  17. «El Consejo de Ministros.». El Liberal (9998) (Murcia). 30 de abril de 1930. p. 3. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  18. «La Gaceta. Reformas militares». El Dia (3117) (Palma de Mallorca). 18 de junio de 1931. p. 4. Consultado el 14 de octubre de 2024. 
  19. «El general Balmes se hiere involuntariamente falleciendo una hora después.». La Gaceta de Tenerife (8581) (Tenerife). 17 de julio de 1936. p. 3. Consultado el 13 de octubre de 2024. 
  20. Cruz, Juan (22 de mayo de 2011). «"Creo que Franco ordenó un asesinato para empezar la guerra"». El País. Consultado el 23 de septiembre de 2011. 
  21. Morales, Manuel (19 de enero de 2018). «La autopsia del general Balmes apunta a Franco». El País. Consultado el 20 de enero de 2018. 
  22. «La muerte del general Balmes, clave para el inicio de la Guerra Civil». eldiario.es. 13 de abril de 2018. Consultado el 16 de abril de 2018.