Desde su blog,
Magade nos propone escribir sobre el "el arte de no hacer nada",
reflexionar y escribir sobre eso, sobre el placer de no hacer nada, de
disfrutar el momento.
Hasta que termine el día
Al despertar, Alejandro Escaleta se encontró con una bandeja de desayuno,
llevada por Roxana Frigia, su socia creativa y compañera de intensas
sensaciones. Le dedicó una mirada a la bandeja, con café con leche y facturas.
Y una significativa a Roxana, vestida con una camisa de Alejandro.
-Ya habrá tiempo para eso.
Luego del desayuno, Roxana se encargó que Alejandro saboreara del gran
placer, que era un rito, en el que se olvidaban del resto del mundo.
Ambos se quedaron mirando al techo.
- ¿En qué estás pensando?– preguntó Roxana, enroscada a Alejandro.
-En lo que pasamos para llegar a momentos como esto. Todas las dificultades
que tuvimos que vencer, para llegar a conocernos. Y todo eso, luego de esa vida
pasada, cuando eras Eva Sivana.
Silencio.
-¿Arruiné un buen momento?
-Y mucho. Pero podríamos arreglarlo.
-¿Qué tenés en mente? –preguntó Alejandro
- No tenemos trabajo urgente. Y podemos hacer que nos traigan comida.
-¿Vas a recibir la comida así? –dijo Alejandro, mirándola con
fascinación.
-No es necesario. Somos vecinos de El Viajero Interdimensional. Puede
dejar algo junto a nuestro tablero de dibujo.
Un par de horas después, Roxana ingresó a la habitación, con una bandeja
con el almuerzo, platos, bebidas.
-Me parece que me estás alejando del tablero –dijo Alejandro, mientras
masticaba.
-Es que te conozco. Estás pensando dibujar nuestra amiga, la más hermosa,
en peligro –contestó Roxana- Y cuando nos conocimos te dejé en claro que no me
gusta.
-Uff, todavía me duele esa cachetada. Pero no estoy pensando en ella.
Sino en Octavia.
-¿La amiguita y rival de Lilith Blue? –preguntó Roxana- ¿La abogada que se parece a nuestra agente inmobiliaria?
-Esa misma–contestó Alejandro.
-Contáme.
-Octavia está en su oficina, en una mansión. Por la ventana irrumpen unos
seres encapuchados, sombríos, con la misión de asesinarla. Ella quiere huir.
Pero es rodeada. Se resiste pero la llevan al escritorio. Hay un cuchillo
ritual o una garra sobre ella. Y entonces…
-Esperá un momento, que traigo el postre y seguimos con la historia.
-Roxana, mi amor, ¿hasta cuándo planeas que sigamos con esto?
-Hasta que termine el día. Y tal vez más.
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Una original forma de no hacer nada , haciendo mucho, jahaja
ResponderEliminarBuena forma de resumirlo.
EliminarGracias por tu jajaja.
¡vaya! todas las formas que inventa roxana para alejar del tablero de dibujo a alejandro.
ResponderEliminary alejandro que no está, como se dice, muy apurado en dibujar...
saludos.
ajaja.
EliminarMe gusta la manera con que resumiste mi relato.
¿Y quien lo estaría, en esas circunstancias?
Saludos.
Creo que hay algo de celos en Roxana, al parece son celos bonitos que la llevan a crear esas situaciones romanticas, pero estan como al borde de ser unos celos feos.... el no dejar que Alejando se acerque al tablero puede ser sintoma de algo muy grave.
ResponderEliminarTengo lectores muy observadores, que notan algunos aspectos de mis personajes, que yo no noto. Es curioso.
EliminarHay situaciones muy románticas, sin duda. Puede ser que haya algo de celos profesionales, que hago algo sin ella. Interesante teoría.
Gracias por tan interesante comentario.
Genial relato. Hay veces que uno no desea hacer nada. Te mando un beso.
ResponderEliminarY hasta puede ser muy interesante el no hacer nada.
EliminarGracias por tu comentario.
Te envío un beso.
como dice Tracy una buena manera de tumbarse a la bartola,
ResponderEliminarAsí, es una buena forma.
EliminarSaludos.
Es muy placentero que te traigan la bandeja para desayunar y después "besayunar", y "comerse" de ambas maneras... uhmm muy excitante la situación, me imagino ese rito en el que Alejandro y Roxana se olvidaban del resto del mundo. Me lleva a imaginar esa escena tan erótica. Y cuando se enrosca a Alejandro mientras que él la dice las dificultades que atravesaron hasta llegar a conocerse. A veces la vida te pone en mil situaciones difíciles pero todo tiene su recompensa. Como en este caso. Ambos ahora están juntos.
ResponderEliminarMe ha encantado tu relato, Demiurgo, un placer leerte.
Besos especiales.
Sin duda que lo es. Me gusta como uste las comillas, para esa actividad mutua. Una situación muy sugestiva, que ese uhmmm tuyo, tan especial, resumen muy bien.
EliminarCreo vislumbrar esa imaginación tuya. Si es tu deseo, podés escribir sobre lo que imaginás.
Así es, una merecida recompensa para ambos.
Es un placer que me leas. Besos especiales.
Muy romanticos y con muy buen apetito los enamorados. Muy bien contado, sin detalles, pero significativa historia.
ResponderEliminarSaludos.
Definiste muy bien a los Frigia.
EliminarMe gusta lo de significativa historia.
Saludos.
Que linda es ella!! Le lleva el desayuno..y el postre. Claro que has omitido el intermezzo que relaja los sentidos, pero ya cada quien que se imagine..lo que ha llamado la atención es el tablero...tener algo así donde poder comunicarse en otros planos...No puedo juzgar a Roxana por impedir que Alejandro de acerque pero..si fuera yo, utilizaría ese tablero a mas no poder...hay mucha historia a sacar de eso....Besosss...me ha gustado mucho este no hacer nada
ResponderEliminarElla tiene sus méritos, muy apreciables.
EliminarFue mi intención, el que cada lector usara la imaginación.
A Roxana no le gustaba lo que sospechaba que Alejandro planeaba dibujar. Pero aportaste una idea interesante para desarrollar.
Claro que la integridad del tablero podría sufrir algún daño. Pero es secundario.
Es un logro que te guste mucho. Besos.
¿No hacer nada sin dejar de hacer? ¡Qué curioso! Pero qué mejor manera que seguir con una historia de comerse y sentirse.
ResponderEliminarMil gracias, Demi, por sumarte a la convocatoria y refrescarnos en estos calores que hace por estos lares de aquí.
Un beso enorme y cuídate muchísimo.
Puede ser una paradoja pero a los personajes les funcionó.
EliminarDefiniste muy bien lo de comerse y sentirse.
Tuvo su desafío pero siempre deseo sumarme a tus convocatorias. Me alegro de te haya servido para refrescarte.
Lo haré. Un gran y especial beso.
Se está buscando otra cacheado. Supongo que la protagonista no importa.
ResponderEliminarla busca a propósito, no?
para tener otra excusa para día libre más adelante.
Sin duda, un placentero no hacer.
Abrazooo Demi
Podría ser, que la historia de Octavia, la abogada, es un pretexto para un intenso día libre.
EliminarSin la menor duda.
Saludos, Gabialante.
Una forma curiosa y original de no hacer nada, haciendo más de lo que parece. Un abrazo
ResponderEliminarAsí es, me gusta tu resumen.
EliminarUn abrazo.
Pensar es una forma de crear, así que no es que están haciendo nada, esos dos parecen que saben aprovechar el tiempo aún en sus descansos. Abrazos
ResponderEliminar¿Y cómo callar al pensamiento?
EliminarUn buen punto de vista, sí que saben aprovechar sus descansos.
Un abrazo.
Cada vez es más difícil tener el tiempo de no hacer nada, se/nos van cerrando muchas opciones y solo parece quedar la posibilidad de producir y producir...
ResponderEliminarSaludos,
J.
Así es, puede ser un desafío tener ese tiempo.
EliminarSaludos, colega demiurgo.
Hermosa manera de no hacer nada y hacer todo a la vez, todo lo bueno e placentero, me gusta la idea, la historia, saludos Demiurgo.
ResponderEliminarPATRICIA F.
Me gusta como definiste a mi relato.
EliminarQue logro que te haya gustado.
Saludos, Patricia.
Nos quedamos con el suspense de que le ocurrirá a Octavia con esos encapuchados que la quieren asesinar... Pero claro, hoy va de no hacer nada. Tendremos que esperar.
ResponderEliminarNos quedaremos con el suspenso, lo cual me incluye, de esa ficción dentro de una ficción. Es probable que Octavia se vuelva tentadora para ganar tiempo, para que alguien la rescate.
EliminarPero esta vez se trata de no hacer nada.
Saludos.
Hola:
ResponderEliminarPreveo que van a tener que descansar de este "no hacer nada"... jajaja...
Un abrazo.
Hola.
EliminarDescansar de este no hacer nada. Me gusta lo que pensaste.
Tal vez sea Alejandro quien tenga que descansar más. Roxana se portó en forma apasionada.
Me gustó tu jajaja.
Un abrazo.
Hacer están haciendo ,otro tema es que es mas placentero que otra cosa... pero todos necesitamos mas de un dia así y quien diga que no, miente como un bellacx.
ResponderEliminarUn besazo Demi!
Tal vez sea la paradoja de que no hacer nada puede ser algo muy activo. Está claro de que es muy placentero.
EliminarY sin duda que se necesita más de un día así.
Un gran beso, Morella.
Jajaja No lo va a dejar usar su tablero, pero en algún momento se terminará esa larga lista de no hacer nada... Me ha gustado tu relato, que placer que te lleven el desayuno a la cama y con postre incluido jaja Besos por ahí!!!
ResponderEliminarMe gusta tu jajaja, lo agradezco.
EliminarEs verdad, en algún momento se terminará esa larga lista, pero mientras tanto disfrutarán de esa situación.
Todo un placer. Que bien que te haya gustado.
Te envío besos.
"Dolce far niente" Deberíamos practicarlo todos y cada vez que podamos, en este mundo que nos devora.
ResponderEliminarMuy buen reto!
besos.
Estoy de acuerdo con tu comentario.
EliminarSí, muy buen reto.
Besos.
Hay muchas maniobras de distracción que pueden aplicarse.
ResponderEliminarDesconfío de aquella de "la carta robada de Poe", pero a veces (algunas veces) lo más evidente pasa desapercibido.
Abrazos, master!
Sherlock Holmes calificó a August Dupin como un macaneador. Se puede descofiar de La carta robada. Pero puede ser real en algunas ocasiones.
EliminarSaludos, Master de la pintura.
Un retiro para suspirar y no hacer nada durante el desayuno, que luego se transforma en momentos de creación literaria. Es una forma original de no hacer esfuerzo físico (a no ser que esos dos acaben entregándose a desfogarse mutuamente).
ResponderEliminarBuena aportación.
Saludos.
Lo resumiste bien.
EliminarEs verdad, es una forma de esfuerzo físico.
Me alego de que te parezca buena aportación..
Saludos.
Momentos así desencadenan en una buena historia .
ResponderEliminarCompletamente de acuerdo.
EliminarBesos.