Me obligo a
Entender las piruetas kamikazes
que ejecutas
ante mí, al mismo tiempo
que lo
coherente puebla tu locuaz pensamiento,
y en ese
balanceo vertiginoso de vuelta y media o,
media vuelta
encuentras
el asentimiento de Mi Mirada,
esa que te abraza aferrándose a todo cuanto
ERES.
Comprender
que el camino se estrecha y,
no todos los
pasos caben en él,
que los míos
deben quedar en lo alto de una Almena,
y fiel a mi condición
solo ser ese
animal que observa y protege
cual Felina
en su Selva.
Y Tú,
Mi Estrella,
Rielas en Mi Camino.
©
Auroratris