The celebrated Spanish cartoonist’s most ambitious work yet is a touching homage to his mother and a bittersweet depiction of life in post-war Spain. It all starts with a an ordinary scene of a young woman and her family picnicking at a Valencian beach in 1947. Now in her twilight years, Antonia cherishes this photo dearly; it holds the memories of her upbringing, her family ― the key to her Eden. Taking off from this routine family outing, cartoonist Paco Roca paints a heartfelt portrait of his mother’s formative years. This delicate portrayal of a humble family is at once an intimate biographical story and a broader reflection of the hardscrabble existence many faced in post-war Spain. Antonia and her family soldier through constant hunger, the shady dealings of the black market, traumas of war and parental abuse, and the oppressive atmosphere wrought by the Catholic church and Franco’s authoritarian regime ― and yet, they find oases of joy and wonder in cinema, imagination, and small acts of kindness. Roca is known the world over for his quietly powerful graphic novels, from Twists of Fate to The House , and this latest masterwork may just be his magnum opus. In Return to Eden , Roca manages to charge quotidian life with rare poignancy, in all its daily struggles and daydreams, and readers will come away deeply affected. Full-color illustrations throughout
Francisco Martínez Roca (aka Paco Roca) is a graphic artist and a cartoonist from Valencia, Spain, who has won several art/writing awards. His graphic novel Wrinkles has been adapted into an animated movie.
Como lector, mantengo una relación especial con Paco Roca. Tres de sus obras, leídas estos últimos años, están vinculadas con momentos recientes de mi vida y de mi memoria. "Arrugas" llegó a mí un año después de ingresar a mis padres en una residencia. "La casa", meses más tarde, reflotó recuerdos del pasado, especialmente de la relación con mis hermanos, reavivada estos dos últimos años por las visitas compartidas al pueblo de la infancia, donde está situada la residencia. Ahora, recién fallecida mi madre, víctima de la pandemia, Roca publica esta obra sobre la suya, sobre todas las madres de aquella generación que se nos muere, encerrada, recluida, y que retoma, en su última hora, el padecimiento que les tocó sufrir durante sus primeras décadas de vida. "Regreso al edén" es una de esas obras que describen toda una época y que, como un retablo, carecen de una trama de ficción al uso, pues el argumento es la vida misma. Magníficamente estructurada, va haciendo paradas en la historia de cada uno de los miembros de la familia, brilla en el devenir narrativo y flaquea en los raros momentos en los que se entromete el frío dato histórico, Franco y su dictadura. Son, por contra, los padecimientos de nuestros padres y abuelos, su quehacer diario, los que llenan de vida las páginas de una obra que, como suele ocurrir con este autor, colman de emoción el corazón del lector. Hay aciertos inmensos en este cómic. El comienzo es el primero de ellos, una utilización maestra del medio y sus posibilidades, pero si he de quedarme con uno en concreto, lo hago con la secuencia del bombardeo, esa que culmina con una viñeta tremenda, bajo una escalera, y que te sacude páginas más tarde, cuando por repetición equipara dos sucesos violentos que acaban en un mismo refugio. El dibujo rinde con gran eficacia y los saltos en el tiempo están bien marcados por diferencias cromáticas, algo ya utilizado por Roca en "El invierno del dibujante". Precisamente, quizás echo en falta un final algo más original, una menor reutilización de hallazgos, pues el artificio con el que finaliza este cómic tampoco es nuevo. En cuanto al mensaje de fondo, Roca encuentra una vez más la tecla de lo compartido, del pasado común, una España que muchos aún recordamos por los detalles, como las velas a San Antonio o la foto bajo el cristal de la mesilla, y también por aquellos relatos que nos contaban nuestros padres. El hambre, causante de ese afán posterior por que nunca faltara (más bien sobrara) comida en la mesa de los hijos y nietos, y esa obsesión por no tirarla jamás. Los efectos del patriarcado doméstico, presentes en la violencia del cabeza de familia y en los silencios y la resignación de la esposa, pero también en el egoísmo de la suegra. Las casas compartidas, el casarse como escapatoria, los hijos sin padre. Lo que se ve en estas páginas no es ficción, es el pasado real. Y no de un país perdido del tercer mundo, sino de España. Sí, por inverosímil que pudiera parecerles a los nacidos en los últimos 40 años, lo que se desarrolla en estas páginas es España. El hambre, el dejar el colegio siendo una niña para ayudar a la madre (y no saber, ya adulto, leer o escribir bien, ni dividir o multiplicar), el estraperlo, las cartillas de racionamiento, los trabajos de doce horas, las palizas del marido. Todo eso fue España. Nosotros, este país inmerso en la posmodernidad, moderno, tecnificado, refinado, que no conoce el sufrimiento más allá de la rotura del teléfono móvil y que ahora protesta porque es intolerable no poder salir de copas para salvar la vida de quienes les han permitido estar aquí y ahora, vivir en este paraíso. No olvidar, no olvidar nunca. Ese es el mensaje. El conocimiento del pasado es tan importante como el del presente o como el de todo lo demás que se aprende en las escuelas y en la vida.
Paco Roca usa una antigua fotografía para contar la historia de una familia en la posguerra española. Los recuerdos de una anciana sirven para contar el ambiente que se vivía en la España de los años 40, las terribles necesidades de las clases populares y las dificultades propias de las vidas de las mujeres de la época. Esto se lleva a cabo narrando la historia de cada uno de los miembros de la familia, entrelazando las vivencias a través del personaje de la niña que acabaría convirtiéndose en la anciana poseedora de dicha fotografía. La ambientación es brutal y la Valencia de mediados del siglo XX se retrata con gran precisión. El dibujo es maravilloso y perfectamente reconocible como obra del autor. Pero, en mi humilde opinión, el libro quiere abarcar demasiadas historias familiares y la mayoría de ellas quedan apenas esbozadas. Este cómic me hubiese maravillado si hubiese tenido el triple de páginas que me hubiesen hecho comprender mejor las relaciones y personalidades de los retratados en la foto. Pero tal como es se me queda un poco confuso y demasiado esbozado. Aún así, por supuesto, es una historia perfectamente disfrutable y llena de nostalgia que encandilará a los amantes de la historia del siglo XX y de las narraciones familiares.
Paco Roca’s new book is out in a few weeks and I was on my knees for an advance copy. This should not come as a surprise, seeing as I have read 4 of his books and have rated 3 of them five stars. Yet it is a bit of a surprise. The truth is that I find it difficult to pick up a Roca book. He employs the same techniques to perfection time after time. I know what it is that makes me cry and feel cracks along my soul, and Roca has it. It’s a desired pain.
He had previously written a book to commemorate his father, and he followed it up with this one, an ode to his mother. In it, he uses a technique which has fascinated me this past year, and fascinated many others for much longer: the Sebaldian technique of squeezing as much as possible out of a single photograph. Squeezing so hard that from the particular, you get to the general. The family gathers for a photo, and it’s a photo of them on the beach. But zoom in on each face, take a look around, scrutinize hard enough, and you will see everything under the umbrella of human experience, right until you reach the gates of Eden again.
Thank you to Fantagraphics Books for the ARC – in no time at all, they have become my go to publisher for anything graphic novel related. I highly recommend checking them out.
Hay vidas que esconden una tristeza profunda, una dosis extra de pesadumbre. Y, pese a ello, nos aferramos a una memoria convenientemente retocada, a un paraíso perdido hecho a medida en el que fuimos fugazmente felices, aunque realmente no fuese así. Cualquier cosa para seguir viviendo.
El cómic de Roca que más me ha emocionado. Despliega sus tics característicos, pero no empañan la calidad del conjunto.
Sienta bien volver a encarar un domingo lluvioso de un mes de diciembre con una nueva obra de Roca. Y mira que en Regreso al Edén ha habido detalles que me han molestado por gratuitos; básicamente cómo el narrador enfatiza cuestiones históricas implícitas en el propio relato hasta caer en una reafirmación entre innecesaria y paternalista. Pero esta perturbación en la fuerza ha sido rápidamente acallada cada vez que se volvía a hacer presente el recurso de Roca para acercarse a lo que quiere contar, la foto; además de estar plenamente justificado es utilizado de una forma bella y cautivadora. El regreso a un final donde se reúnen lo real y lo onírico/imaginario me ha vuelto a emocionar como cada vez que lo ha utilizado (El faro, Arrugas).
Zanim niebo opanowały samoloty, pokazy baloniarstwa przyciągały niezliczone tłumy gapiów. W Warszawie, Paryżu czy Walencji całe miasta wylegały na ulice i place, by podziwiać gigantycznych rozmiarów, często fantazyjnie przybrane, konstrukcje wzbijające się w przestworza.
Bohaterem hiszpańskiej gawiedzi był pod koniec XIX wieku Antonio Martínez Latur, gimnastyk znany z ryzykownych akrobacji. Antonio został zatrudniony przez firmę Joana Mili i pod pseudonimem Milá lub Kapitan Milá w balonie "Błyskawica" latał nad francuskimi, włoskimi i oczywiście, hiszpańskimi miastami. Zginął w 1889 roku podczas feralnego lotu nad baskijską Vitorią. Na pogrzebie żegnały go tłumy.
Tej historii w komiksie Paco Roki, "Powrót do Edenu" nie znajdziecie. Znajdziecie za to bajkę o "Kapitanie don Milanie", który uniósł się nad Walencją i odleciał w przestworza. Nigdy nie wrócił, ale na zawsze zapisał się w pamięci Antonii, matki autora. Choć sama nigdy nie widziała Kapitania Mili, wielokrotnie opowiadała o nim synowi, łącząc i plącząc różne historie. Z tych opowieści, skrawków wspomnień, niedomówień i jednej fotografii utkał Roca wzruszającą, ciepłą opowieść o losie (niektórych) kobiet w dwudziestowiecznej Hiszpanii.
O tym, że plaże bywają rajskie wiemy wszyscy. I choć zatłoczona plaża w Walencji, na którą czasem jeździła tramwajem rodzina Antonii, nie wygląda na zbyt rajską, to dla bohaterki tego komiksu oznaczała wszystko to, co w raju można znaleźć - chwilę spokoju, radości, wytchnienia od codziennego życia pełnego przemocy, upokorzeń i biedy. Fotografia, na której znalazła się wraz z częścią rodziny, była dla Antonii najcenniejszą pamiątką. Trzymała ją pod szkłem na nocnym stoliku. Chciała mieć swój Eden zawsze blisko.
"Powrót do Edenu" opowiada losy Antonii, jej matki i sióstr, które żyły w biedzie, terrorze państwa, religii i patriarchatu. To historia o tyle zaskakująca, że Antonia nigdy nie nauczyła się pisać i czytać. Pozostała analfabetką, bo nigdy nie miała czasu na naukę - w domu zawsze trzeba było coś posprzątać, ugotować, wyprać. A gdy dorosła przeszła z jednego domu do drugiego, nowego kieratu. Antonia żyje, ma dziewięćdziesiąt lat, a jej syn stworzył komiks będący hołdem wobec matki, która całe swoje życie poświęciła rodzinie.
Żyjąca w świecie ludzi pozbawionych edukacji, w którym filmy nie są bajkami, a opowiadają prawdziwe historie, w którym nie ma miejsca na wyjazd poza rodzinne miasto, szczęście znajdowała Antonia we wspomnieniach, bajkach, mieszaniu zasłyszanych historii z własnym doświadczeniem. Komiksowa forma wydaje się wręcz idealna do opowiedzenia historii łączącej realne, zasadniczo smutne i ciężkie życie Antonii z wyobraźnią, po którą, starzejąc się, sięgała częściej.
Komiks po raz kolejny (i nie wiem już który) udowadnia, że jest idealnym medium do opowiadania historii rodzinnych, dzięki szybkim skrótom i możliwościom zastosowania zróżnicowanych stylistyk, zmian kolorystyki, łatwiej niż w prozie można pokazać nie tylko przemiany społeczne, historię przez każde “h”, ale też to, co nam w głowach siedzi - bajki i mity. Paco Roca również kolejny raz - przypominam choćby jego genialny “Dom” i wciąż niewydane w Polsce “Arrugas” - pokazuje, że jest nie tylko fantastycznym rysownikiem, ale i pisarzem, kimś kto potrafi opowiadać prywatne, intymne historie tak, by nabrały epickiego rozmachu.
Dzień, w którym zrobiono zdjęcie Antonii i jej rodzinie na plaży wcale nie był dniem szczęśliwym. Co się wydarzyło i kogo nie ma na tej fotografii - warto się tego dowiedzieć z lektury.
La historia gira en torno a una fotografía perdida de Antonia (la madre de Paco Roca), una de las pocas que se hizo antes de cumplir los veinte años y la única que tiene junto a su madre y que necesita recuperar a toda costa. El autor va desgranando la fotografía de la familia, miembro a miembro, haciéndonos retroceder en el tiempo hacia la España de la posguerra y mostrándonos las dificultades que pasaron bajo la dictadura franquista siendo una familia muy humilde. Pasado y presente se van entremezclando a través de esa foto que parece no decir nada pero que guarda sueños, secretos, dolor, rabia, amor y mucha nostalgia.
La narración intimista, aderezada con las acertadísimas referencias políticas y religiosas, consiguen que te emociones pero también aprendas, y eso hace que la obra sea aún más especial y necesaria. Mención aparte a la composición de las viñetas y los colores, dando efecto de fotografía antigua. De tiempo pasado. De pérdida.
Qué maravilla, de verdad que sí. Faltan pocos días para terminar el año y esta obra se gana un puesto entre mis favoritas del 2020.
Es tierna. Inteligente. Cruda. Y triste. Esa tristeza que viene de la nostalgia, que te estruja el corazón y te hace sufrir como si fueras la propia Antonia observando la fotografía de tu vida. Quizá nuestras circunstancias son muy distintas, pero ver la lucha de una madre que bien podría ser la tuya convierte esta historia en algo cercano y real.
Paco Roca’s displays much love for his mother and his ancestors through the Franco era Spain. The intertwining story lines were very reminiscent of preserving ancestral history.
The story reminded me of my grandmothers stories that were a web within family saga. These stories were passed down to keep the history and love for family alive. The artwork was so beautiful and the coloring was striking. Mil gracias!
Mais uma vez eu regresso a Paco Roca e nunca me arrependo de o fazer. Esta novela gráfica é uma pequena maravilha.
Regresso ao Eden conta a história de Antonia e da sua família, tendo por base uma fotografia tirada na praia, em 1946. Uma fotografia que a acompanhou em grande parte da sua vida e que era, para si, o bem mais precioso que possuía.
Através da história desta família humilde, o autor retrata a sociedade espanhola da época, nomeadamente do regime franquista do pós-guerra. O clima repressivo e a força moralizadora da igreja católica, a pobreza e a falta de alternativas, principalmente para as mulheres, marcaram gerações.
Uma história que me emocionou e que também me fez sorrir. Paco Roca sabe criar esta dualidade com mestria, conta histórias tristes que nos aquecem o coração.
Otra pequeña (gran) maravilla de Paco Roca que todos los que hemos llegado a cierta edad reconocemos, en mayor o menor medida, con más o menos puntos de encuentro, en la vida de nuestros padres y de sus hijos (nosotros). Es impresionante, y no creo que sea fácil, que Paco pueda comunicarnos con sus dibujos, con sus guiones, con su manera de contar una historia, algo tan profundamente metido dentro de nuestros sentimientos como es el paso del tiempo, de ese tiempo, de ese pasado tan propio, tan íntimo de este país, ya perdido para siempre, pero que quedará impreso en estas páginas para que no caiga en el olvido.
No hay como empezar un año leyendo a Paco Roca, no tengo nada que decir sobre la historia, personajes, ambientación, maquetación, presentación... solamente que cuando un cómic hace que te salten las lágrimas algo grande tiene, lo hizo con La Casa y lo vuelve a hacer con éste. Simplemente gracias.
Mientras leía "Regreso al Edén" me he acordado de Atxaga cuando habla del epitafio de Seikilos, una de las canciones más antiguas que se conservan. Como ese epitafio, la obra de Roca, parece estar colocada ahí como "señal duradera de un recuerdo inmortal". Y a pesar de ser obras que tratan temas tristes, su lectura siempre llama a la vida. Como se dice también en el epitafio: "Mientras vivas, brilla, no sufras por nada; la vida dura poco, y el tiempo exige su tributo".
Los comic de Paco Roca se han convertido en un lugar conocido, con pocas sorpresas, sean negativas o positivas.
Dibujo amable y entendible, guiones intimistas, y sobre todo, una temática entre memorística y melancólica, ambientada circa la posguerra española.
En ese sentido, el guion es un poco tópico: hambre, machismo, familias pobres de barrio, etc. vamos lo habitual de la generación anterior a la mía. Leyéndolo me recordaba a mis padres, mis tíos y mis abuelos. No hay grades giros, ni revelaciones. Igual si has crecido en una casa de clase media alta no te suena, pero para alguien que viene de una familia de clase trabajadora, de aluvión, pues un poco tema recurrente. En cuanto al arte, pues más de lo mismo, pocos riesgos, amable y resultón. Es un poco como el anterior, como "La Casa", o como las partes más sociológicas de su comic sobre el golpe de estado militar que derivó en la guerra.
Si le he dado una estrella más es por las 6 primeras páginas, donde el autor arriesga en el formato, se sale de su zona y desarrolla un concepto de la brevedad de la vida como un relámpago de luz en la oscuridad que es formalmente atractivo.
Como reflexión general, entiendo que a Roca le están funcionando muy bien comercialmente estas historias, y que se siente muy cómodo en ellas, pero en mi caso sus comics empiezan a producir una sensación de "deja vu", de dejarse llevar, que empiezan a hacerme plantear si comprar su siguiente trabajo si este vuelve a ser un "drama-intimista-pos-guerra-civil-crudo-pero-amable-y-edificante-formalmente-correcto".
Eso si de cara a las compra navideñas, y si tienes entre 35 y 45, es un comic que le puedes regalar a tu madre o a tu padre, no se si me entendéis.
Que sí, que habrá clichés y que es una historia ya explicada, pero la sensibilidad con la que Roca trata a sus personajes es siempre única. Creo, eso sí, que la historia daba para más, o bien es que simplemente se me ha hecho corto y ahora hay que esperar meses hasta que el autor acabe el siguiente.
Muy bueno. Me gusta mucho cómo refleja la vida que debió llevar mucha gente pobre en la posguerra a través de los miembros de la familia protagonista. La forma de contarlo me parece muy original y el final me ha gustado mucho. Lo que me ha faltado es algo más sobre el padre desde su perspectiva.
Splendido graphic novel di commovente bellezza e con alcune tavole sorprendenti, che racconta un'amara vita di miseria nel dopoguerra franchista in Spagna.
Otro libro del gran Paco Roca que, desde que lo abres, ya sabes que va a llevarte al terreno de los sentimientos y te va a tocar la fibra sensible. En este caso va a centrarse en una foto de una familia mientras disfrutaban de un día de playa allá por el 1946. Poco a poco irá hablándonos de esa familia, de cada uno de los miembros, de las relaciones entre ellos y de lo que siente y vive cada uno hasta el momento de hacerse esa foto (y de después). Pero no se queda ahí, y es que como siempre el autor nos va aún más allá. Esta vez nos hablará de la España de la postguerra y cómo la vivieron las familias más humildes que sobrevivían bajo la dictadura franquista. Nos habla de los problemas de antaño como el racionamiento de los alimentos no eran suficientes y que les hacía acudir al mercado negro. No es la que más me ha gustado del autor pero si es altamente recomendable. Voy a leer todo lo que publique este señor porque, desde luego, vale oro. Mi nota para este libro es de 4⭐
Estas últimas semanas la vida no me ha dado me para dictar reseñas ni de 5 minutos...
Leer y mirar las viñetas de este libro de Paco Roca ha sido para mí como untarme con un bálsamo curativo.
Me encanta leer reseñas literarias. Cuando acabo de leer un libro que me ha parecido excelente me gusta también leer algunas reseñas negativas. En una de ellas he leído sobre este libro que Paco Roca se repite en su dibujo respecto de obras anteriores, trata temas conmovedores con lo cual es fácil llegar a tocar la fibra sensible de las personas y acaba con una crítica que dice algo así como que este es un libro que le podrías regalar a tu madre.
Doy fe de que todo lo anterior es cierto. Incluso lo de la madre. Cuando a mi lectora favorita, con muchas décadas a sus espaldas y una situación vital difícil se le ilumina la cara al llevarle libros de Paco Roca... para mí Paco Roca se merece no solo las cinco estrellas de goodreads sino todas las estrellas del firmamento.
4.5-5*. Qué preciosidad de libro. Estoy muy contenta de haberlo elegido como última lectura del año. Me ha emocionado y me ha hecho pensar en tantas cosas... Paco Roca es un gran autor y tiene una capacidad sorprendente de crear grandes historias y contarlas a través de imágenes.
Qué delicia de novela gráfica. Me ha encantado ver esos sitios de Valencia de los que siempre he oído hablar a mis padres y conocer la historia de la protagonista. Una historia dura pero a la vez preciosa.
Um livro que deixa um certo sentimento que mistura a doçura e a amargura. A nostalgia do passado e aquilo que se inventa para aguentar a vida que se leva. Enternecedor, mas também cruel... Apesar de sentir que falta qualquer coisa a esta hustória (não sei... talvez mais vinhetas dedicadas à vida adulta de Antonia), a verdade é que achei este livro muito bem estruturado. A narrativa flui, mesmo com os diversos saltos temporais. Muito bom.