Pena de muerte

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«Puede que sea la última cara amistosa que vea en toda mi vida. Debo admitir, que en este momento lamento dolorosamente haber ayudado a restaurar la pena de muerte en Riosa.»

―Ransom Casterfo, a Leia Organa^[fuente]

Fives's and Jesse's execution — Los soldados clon «Cincos» y «Jesse» de pie ante un pelotón de fusilamiento en Umbara.

La pena de muerte, o ejecución, era la práctica de imponer el castigo de muerte a las personas condenadas por ciertos delitos graves. Los mundos con la pena de muerte generalmente contaban la traición como un delito capital.^[1]

Historia[]

«No me insulten con deliberaciones falsas. ¿No son soldados ahora? ¿Mi castigo no debería ser la muerte?»

―Prosset Dibs, al Alto Consejo Jedi^[fuente]

Al inicio de las Guerras Clon, el Maestro Jedi Prosset Dibs fue declarado culpable de traición por intentar asesinar a su compañero Maestro Jedi Mace Windu durante una misión a Hissrich. Dibs, que había llegado a considerar a los Jedi como tiranos, esperaba que su castigo fuera la muerte, pero en lugar de eso fue condenado a rehabilitación a petición de Windu.^[2]

Rexecutioner-CoK — La ejecución del General Jedi Pong Krell durante la Batalla de Umbara.

En la República, aunque era ilegal, también se ejecutaba a los traidores sin juicio. Como es el caso del General Jedi Pong Krell en la Batalla de Umbara, quien ordenó fusilar a los soldados clon CT-5555 y CT-5597 por traición a la República sin previo aviso de sus superiores. Poco después de que fracasara su ejecución, el Capitán CT-7567 sentenció a Krell a muerte por colaborar con los Separatistas.^[3]

Más tarde, durante la guerra, la Padawan Jedi Ahsoka Tano fue expulsada de la Orden Jedi y juzgada por un tribunal de la República por cargos de asesinato y traición. Tano había sido atrapada en el atentado al hangar del Templo Jedi, y el fiscal, el Almirante Wilhuff Tarkin, se comprometió a garantizar la condena de Tano y defendió la pena de muerte para los ex Jedi, para gran sorpresa de este último. En última instancia, la verdadera traidora, Barriss Offee, fue expuesta antes de que el tribunal pudiera emitir su decisión sobre Tano. Tano fue liberada de la custodia de la República, pero optó por rechazar la oferta de la Orden Jedi de volver a unirse a sus filas porque, con la excepción de Anakin Skywalker, no la habían apoyado.^[4]

El Maestro Jedi Quinlan Vos cayó al lado oscuro de la Fuerza después de ser enviado a asesinar al líder separatista Conde Dooku. Falseando la reforma, regresó a la Orden Jedi y cometió actos de traición. Cuando el Consejo Jedi discutió su castigo propuesto, Mace Windu planteó la posibilidad de ejecución, lo que habría sido un paso sin precedentes en la historia de la Orden Jedi. La posibilidad fue seriamente considerada, pero finalmente rechazada, en gran parte gracias a los argumentos de Obi-Wan Kenobi. Sin embargo, después de una segunda traición, la ejecución se consideró casi de forma segura, pero en última instancia los eventos conspiraron para permitir que Vos se reformara.^[5]

En el 4 ABY,^{[cita requerida]} El cadete imperial Zare Leonis fue obligado a asistir a un tribunal por presunta traición contra el Imperio Galáctico. Se declaró culpable de todos los cargos en su contra y fue sentenciado a ser ejecutado, pero escapó antes de que se pudiera llevar a cabo la pena y llevó a cabo un rescate de su hermana.^[6]

Vader and Tarkin in the conference room — El Gran Moff Tarkin, después de enterarse de que la base rebelde en Dantooine fue abandonada, planeó que la Princesa Leia Organa fuera asesinada.

Después de que la Princesa Leia Organa fue capturada por el Imperio Galáctico mientras transportaba los planos robados de la Estrella de la Muerte a Tatooine, el Gran Moff Wilhuff Tarkin firmó una orden para su ejecución. Sin embargo, Darth Vader la mantuvo con vida para torturarla por información acerca de los planos robados y la base de la Alianza Rebelde. Tras descubrirse que había dado información falsa de que la base rebelde estaba en Dantooine, Tarkin pidió su ejecución inmediata, pero, después de que el Halcón Milenario llegara a la Estrella de la Muerte, Vader optó por permitirle escapar porque creía que ella lideraría el Imperio a la base.^[7]

En el 28 DBY,^[8] el Senador Ransolm Casterfo prestó su apoyo a una campaña para restablecer la pena de muerte en su planeta natal, Riosa. Para ese momento, más sistemas estelares centristas estaban de acuerdo con él. Irónicamente, Casterfo terminó enfrentando la pena de muerte después de que fue inculpado por el asesinato de Tai-Lin Garr.^[1]

Stormtroopers on the Supremacy — Los soldados de asalto verdugos de la Primera Orden sirvieron como ejecutores para los traidores.

La ejecución fue el castigo prescrito para los traidores dentro de las filas del Cuerpo de soldados de asalto de la Primera Orden. Esta tarea fue llevada a cabo por aquellos que se encontraban en la posición de soldado verdugo. Estos soldados de asalto especializados fueron rotados a través de turnos de trabajo aleatorios, en lugar de ser una posición mantenida por un solo grupo de individuos. Como tal, a cualquier soldado de asalto se le podría asignar este deber, pero nunca se sabía a quién, ya que las asignaciones se mantenían en el anonimato.^[9] Finn, un desertor de la Primera Orden, una vez conocido como FN-2187, temía esta tarea y pasó sus turnos en ella fervientemente esperando que el día terminara sin que tuviera que realizar ninguna ejecución. Su propia deserción más tarde hizo que él y Rose Tico terminaran enfrentándose a este destino, pero los dos se salvaron cuando la nave insignia de la Resistencia, el Raddus, se estrelló contra el Supremacía, matando instantáneamente a sus verdugos.^[10]