La Coronación de T'Challa fue un duelo solicitado por M'Baku de la Tribu Jabari, en un intento por desafiar a T'Challa por el título de Rey de Wakanda.
Antecedentes[]
Una semana después de que T'Chaka muriera a causa de un atentado orquestado por Helmut Zemo, T'Challa regresó a Wakanda para ocupar su lugar como Rey. El día anterior a su coronación, T'Challa decidió invitar a su ex novia, Nakia al evento, quien estaba ocupada en una misión fuera del país. Al llegar al palacio, T'Challa fue recibido por su madre y su hermana, quienes estaban felices por su ascenso al trono. Por tradición de la ceremonia, T'Challa debía estar dispuesto a pelear contra un guerrero de alguna de las tribus de Wakanda, siendo el vencedor de este duelo quien se convertiría en Rey.[1]
Coronación[]
- "La victoria en el ritual de combate se obtiene por rendición o muerte. Si alguna tribu desea proponer a un guerrero, ahora ofrezco un camino al trono."
- ―Zuri
En la Cascada de Guerreros, el Chamán Zuri procedió a darle de beber a T'Challa una sustancia que neutralizó los efectos de la Hierba Corazón y también los poderes de la Pantera Negra brindados por Bast. Acto seguido, presentó al príncipe ante los representantes de las cuatro tribus presentes, la Tribu Comerciante, la Tribu Fronteriza, la Tribu del Río, la Tribu Minera. Zuri luego le dio a todas las tribus presentes la oportunidad de elegir a un guerrero para desafiar a T'Challa por el trono, no obstante, ya que esto era visto como una simple formalidad, cada una de las tribus reclinó la propuesta. Zuri también le ofreció a algún miembro de la realeza darle la chance de luchar con T'Challa. Shuri, la hermana de T'Challa, sorprendió a todos al alzar la mano, sin embargo, estaba haciendo una broma para tratar de llamar la atención y apresurar el proceso.
Repentinamente, la ceremonia fue interrumpida por los cánticos de los miembros de la Tribu Jabari, quienes llegaron con su líder, M'Baku. Expresando su molestia por la inmadurez de Shuri supervisando los mayores avances tecnológicos del mundo, y su imprudencia al burlarse de una tradición sagrada, M'Baku se giró para recordarles a todos que estaban a punto de dejar el destino de la nación en manos de un príncipe que no había sido capaz ni siquiera de salvar la vida de su propio padre. Finalmente, M'Baku desafió al príncipe y él aceptó.
Rodeados por la Dora Milaje y los Jabari, T'Challa y M'Baku se pusieron máscaras ceremoniales de pantera y gorila respectivamente, empuñaron sus armas correspondientes y Zuri dio inicio al duelo. En primera instancia, M'Baku pareció llevar la delantera, ya que derribó a T'Challa y le hizo soltar sus armas. Luego lo atrapó con sus propios brazos golpeándole el rostro hasta hacerlo sangrar. A pesar de que T'Challa estuvo a punto de perder el conocimiento y también recibió una puñalada superficial en el pecho, él consiguió reunir la fuerza suficiente para librarse de la lanza de M'Baku, derribarlo y hacerle una llave mientras el dúo pendía de la orilla de la cascada.
No queriendo matar a M'Baku, T'Challa lo instó a rendirse, pero éste le dijo que preferiría morir. Mientras la multitud cantaba el nombre de T'Challa, éste le señaló a M'Baku que su pueblo lo necesitaba, momento en el cual el líder Jabari hizo una seña y finalmente aceptó la victoria de su oponente. Con la multitud aclamando por su nuevo Rey, Zuri procedió a colocarle a T'Challa su collar ceremonial y lo proclamó Rey de Wakanda al identificarlo como la nueva Pantera Negra.[1]
Consecuencias[]
Ya coronado Rey de Wakanda, T'Challa fue llevado a un ritual para consumir la Hierba de corazón, con el fin de recuperar sus poderes y reencontrarse con T'Chaka en la Dimensión Astral. Tiempo después, M'Baku saldó su deuda de misericordia con T'Challa al salvarlo de ahogarse en el río, ya que N'Jadaka lo desafió a un duelo en el que fue derrotado y lanzado a las profundidades del río para morir.[1]