Elder Scrolls
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Artículo principal: Libros (Online)

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  • Posada Penas Desvanecidas, Fluvia.

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De Tandemen, sapiarca de observación extranjera

Fue en el año 576 de la Segunda Era, cuatro años antes del regreso de Ayrenn y la creación del Dominio de Aldmer, cuando Euraxia Tharn asesinó a la familia real de Anequina y reclamó ilegalmente el trono de Rimmen. ¿Cómo sucedió esto y qué debería hacer el Dominio al respecto? Me tomaré la licencia de hacer algunas observaciones pertinentes.

Ese mismo año, el emperador Leovico había legalizado el culto a los daedra en todo el Imperio de Cyrodiil, lo que provocó inmediatamente una rebelión. Mientras Varen Aguilario iniciaba su propio intento de tomar el control del Imperio, Euraxia Tharn fue enviada en misión diplomática a Elsweyr Septentrional. Aprovechando la confusión, contrató una fuerza masiva de mercenarios nibeneses y marchó hacia Rimmen como un aliado esperado. Como parte del Imperio, el rey Hemakar de Rimmen no se lo pensó dos veces antes de aceptar a una emisaria del emperador. Esto resultó ser un error fatal.

Euraxia hizo ejecutar al rey Hemakar y al resto de la familia real y se proclamó reina de Rimmen. Sus mercenarios, que ahora llevaban la librea de los Euraxistas, se desplegaron y conquistaron rápidamente todo Elsweyr Septentrional, reclamando el territorio que iba desde Fluvia hasta Rimmen. Una vez en el poder, Euraxia no tardó en consolidar su posición. Contrató más mercenarios, adquirió los servicios de un culto de nigromantes y estableció un perímetro de armas de asedio para mantener su control sobre Rimmen. Al pueblo khajiita no le ha ido bien bajo el mandato euraxista. Con todas las implicaciones de la palabra, su reinado no es sino tiránico.

Una vez que la confusión se diluyó y quedó claro lo que estaba ocurriendo, los khajiita formaron una milicia para combatir a los Euraxistas e intentar recuperar Anequina. Cuando la reina Ayrenn estableció la alianza y formó el Dominio, prometió al pueblo khajiita que tendría su apoyo para recuperar el control de Elsweyr Septentrional. Sin embargo, antes de que se pudieran reunir fuerzas para ello, estalló la Guerra de los Tres Estandartes. A excepción de un puñado de consejeros militares y algo de oro que tanto necesitaban, la Fuerza de Defensa khajiita ha estado principalmente a su suerte. Lord Gharesh-ri, portavoz del melena, viajó a Anequina para tomar el mando de la milicia, y bajo su dirección están a punto de liberar la ciudad de Fluvia y la mayor parte del territorio que hay más allá de las murallas de Rimmen.

Por desgracia, Rimmen sigue siendo un bastión para Euraxia, debido fundamentalmente a las armas de asedio que rodean el palacio y que apuntan directamente a la ciudad situada a sus pies. Amenaza, y Gharesh-ri no tiene motivos para dudar, con destruir la ciudad si desafían su control de cualquier forma. Hasta que esas armas queden eliminadas, se espera que Euraxia conserve el trono de Rimmen.

Mientras la Guerra de los Tres Estandartes continúe, es imposible desviar las fuerzas del Dominio para hacer frente a la tirana que los khajiita llaman la reina usurpadora. Solo cabe esperar que, al proporcionar fondos y consejeros, la milicia khajiita pueda resistir hasta que el conflicto de la alianza llegue a su fin. De lo contrario, el Dominio podría acabar enfrentándose a una amenaza procedente de sus propias fronteras una vez termine la guerra contra el Pacto de Corazón de Ébano y la Alianza de Salto de la Daga.

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