Paseo Nuevo.
Un banco.
Tu sonrisa.
La tarde se ha dormido
en el espejo azul.
Tu mirada
escapa mar adentro
persiguiendo una vela
y mil gaviotas,
locas,
dibujan sobre el agua,
pentagramas de luz.
Es Julio.
Anochece.
Tu ternura.
-Donosti se ha vestido
de leyenda y glamour-
Los acordes de jazz
que se derraman
por el aire tranquilo,
se enredan en las olas,
para hacerse poema...
Y a mi lado, estás tú.