Baela Targaryen

Lady Baela Targaryen, apodada Bae^[1], fue la hija mayor del príncipe Daemon Targaryen y su segunda esposa, Lady Laena Velaryon. Tuvo una hermana gemela, Rhaena.^[2] Fue la jinete del dragón Danzarina Lunar.^[3][4]

Apariencia y Carácter[]

Baela es descrita como una mujer de cabello rubio plateado y ojos violeta, tan intrépida como su padre.^[5][6] De joven era una doncella asilvestrada y caprichosa, fibrosa y rápida, más hombruna que femenina que llevaba el pelo plateado tan corto como un muchacho, para que no se le atravesase en la cara cuando cabalgaba. Aunque delgada y de corta estatura, no conocía el peligro y gustaba del baile, la cetrería y la monta.^[7]

Historia[]

Juventud[]

Nacida en 116 d.C. en Pentos, Lady Baela fue la mayor de las hijas gemelas del príncipe Daemon Targaryen y Lady Laena Velaryon. Fue nombrada en honor a su abuelo paterno, Baelon Targaryen. Baela y su hermana gemela Rhaena nacieron pequeñas y enfermizas pero cuando cumplieron medio año de edad y se encontraban más fuertes, Laena y las niñas navegaron hacia Marcaderiva. Poco después, fueron presentadas en la corte por su padre para recibir la bendición de su tío, el rey Viserys I Targaryen, a pesar del desagrado del Consejo Privado.^[8]

Baela creció en Rocadragón debido a que su madre murió cuando ella sólo tenía cuatro años. Tanto ella como su hermana Rhaena tuvieron huevos de dragón, pero mientras el de Rhaena eclosionó en un dragón enfermo que murió a las pocas horas de haber dejado el huevo, el dragón de Baela nació sano y fue nombrado Bailarina Lunar.

En 118 d.C., con la bendición del rey Viserys I, la princesa Rhaenyra Targaryen anunció el compromiso de su hijo, el príncipe Jacaerys Velaryon, con Lady Baela.^[9][10][11]

Danza de los Dragones[]

Tenía trece años cuando estalló la guerra civil conocida como la Danza de los Dragones. Baela se quedó en Rocadragón mientras su hermana Rhaena partió al Valle de Arryn. Se negó a abandonar a su prometido, el príncipe Jacaerys, insistiendo en que lucharía a su lado montada en Bailarina Lunar, aunque la dragona era demasiado pequeña para cargarla. Anunció además su intención de desposarse con Jacaerys de inmediato, pero la boda no se realizó; según Munkun, el príncipe no quería desposarse hasta terminada la guerra, mientras que Champiñón asegura que el príncipe ya estaba casado con Sara Nieve.^[12]

Cuando su madrastra, Rhaenyra Targaryen se hizo con el dominio de Desembarco del Rey y el Trono de Hierro trasladó a su corte allí, pero Baela se quedó atrás, Baela dividió sus días entre Marcaderiva y Rocadragón. Poco después fue descubierta dejando que un pinche de cocina la tocase por debajo de las faldas. El castellano de Rocadragón, Ser Robert Quince, enojadísimo ordenó que le cortaran la mano al chico y tan solo la llorosa intercesión de Baela lo salvó.^[13] Después de perdonar al joven, Ser Robert escribió al padre de la princesa, para infórmale sobre su comportamiento:

"Le gustan demasiado los jóvenes y deberá casarse pronto para no entregar su virtud a alguien indigno de ella"

Se desconoce la respuesta de Daemon a aquella noticia.

Cuando el dragón Fantasma Ceniciento apareció calcinado y destrozado en la isla de Rocadragón, le prohibió a Lady Baela volar en Bailarina Lunar por miedo a que el dragón Caníbal, que se creía había atacado al otro dragón, le hiciera daño. Lady Baela no quedó feliz con la prohibición y esa misma noche trató de escabullirse hasta su dragona pero fue descubierta; luego de eso quedó confinada a sus habitaciones.^[14]

Cerca del final de la guerra, y debido a que Rocadragón cayó en manos de Aegon II Targaryen, Baela pudo escapar de sus habitaciones cuando la puerta fue destrozada. Se las arregló para llegar a su dragón y soltó sus cadenas, ensillándolo y escapando, pero mientras huía se encontró con Aegon II y Fuegosol. Los dragones lucharon hasta el amanecer en el aire, pero cayeron sobre la dura piedra del patio de la fortaleza. Aegon II se soltó de la silla cuando los dragones se encontraban a veinte metros del suelo, pero Lady Baela no corrió la misma suerte y quedó enganchada a la silla de Danzarina Lunar. Finalmente consiguió escapar, pero su dragona fue devorada por Fuegosol. Quemada y apaleada, Baela logró desengancharse de su silla y arrastrarse lejos de su dragona. Ser Alfred Broome la encontró y desenvainó su espada para matarla, pero Ser Marston Mares lo impidió arrancando la espada de la mano de Alfred. Tom Lenguatrabada la llevó hasta el maestre Hunnimore.^[15][16][17]

Cuando el dragón Fuegosol murió poco después, el rey Aegon II Targaryen ordenó sacar a Lady Baela de los calabozos y ejecutarla. Aegon II sólo desistió de matarla cuando la cabeza de Baela estaba en el tocón y el maestre le recordó que era hija de una Velaryon, descendiente a su vez de la mismísima Serpiente Marina. Lady Baela volvió a los calabozos, y un cuervo voló hacia Marcaderiva, amenazando con que sería ejecutada si Alyn de la Quilla no se presentaba en una quincena, para jurar lealtad al rey.

Para finales de 130 d.C., su abuelo juró lealtad ante la reina Alicent Hightower, exigiendo entre otras cosas la liberación de Baela. El rey Aegon II Targaryen se disponía a ejecutarla una vez más cuando la noticia llegó a Rocadragón; el rey y su séquito zarparon en la Ratón hacia Desembarco del Rey, con Lady Baela aún encadenada, por miedo a que atacara al rey si la liberaban.^[18]

Vida en la corte y matrimonio[]

Después de la ascensión de su hermanastro, el rey Aegon III Targaryen, Lord Cregan Stark tomó la regencia en lo que se conoció como la Hora del Lobo. Ordenó ejecutar a todos los hombres involucrados en la traición a Aegon II Targaryen, aun cuando estuvieran actuando por órdenes de los hombres del actual rey Aegon III. Champiñón afirma que Lady Baela empuñó una espada y declaró que cortaría la mano de cualquiera que intentase hacer daño a los hombres que la habían salvado; Lord Cregan sonrió y dijo que, "si la dama tenía tanto cariño a aquellos perros, le permitiría conservarlos". Lord Stark también se mostró inflexible sobre perdonar a Lord Corlys Velaryon, quien había jurado lealtad al rey Aegon II Targaryen a finales de la guerra. Lady Baela y Lady Rhaena apelaron directamente a su hermastro, recordándole que habría perdido una oreja y quizá habría muerto si Lord Corlys hubiera actuado de otra forma; Aegon III no solo accedió a perdonar la vida a la Serpiente Marina, sino que restituyó sus cargos y honores, incluido el puesto en el Consejo Privado.^[19]

En la corte de su hermanastro, Baela y Rhaena eran las únicas Targaryen vivas aparte del rey Aegon III y la reina Jaehaera, pues supuestamente el príncipe Viserys había muerto. Lady Rhaena y Lady Baela salían a cazar, a practicar la cetrería, daban limosnas a los pobres, recibían a los emisarios y señores visitantes junto a la Mano del Rey y hacían de anfitrionas en las fiestas, mascaradas y bailes. Como la gemela mayor, muchos consideraban a Baela como heredera al Trono de Hierro, pero ella detestaba estar en el centro de la atención de la corte de Desembarco del Rey. Su personalidad asilvestrada gustaba de compañía inadecuada para una noble, como un malabarista joven y simpático, un aprendiz de herrero cuyos músculos admiraba, un mendigo sin piernas, un mago de trucos baratos y un par de gemelas de un burdel. A menudo llevaba perros callejeros de regreso a la Fortaleza Roja y ni su septa, Amarys, ni el septón de la fortaleza, Eustace, pudieron cambiar su naturaleza.

En 132 d.C. se acordó que Baela se casaría, antes de poder deshonrar a la Casa Targaryen. Fueron considerados como pretendientes Lord Kermit Tully, Lord Benjicot Blackwood, Lord Lyonel Hightower, Lord Dalton Greyjoy, el príncipe Qyle Martell y el autoproclamado Rey de los Peldaños de Piedra Racallio Ryndoon, pero la Mano Ser Tyland Lannister y el Consejo de Regentes se decidieron por el dos veces viudo Lord Thaddeus Rowan. Sin embargo, Baela no estaba satisfecha con la decisión, diciendo:

"«Lord Rowan me saca cuarenta años; es calvo como una piedra y su barriga pesa más que yo. Me he acostado con dos de sus hijos. El mayor y el tercero, creo. No con los dos a la vez, claro; habría sido indecoroso." ^[20]

Se desconoce si sus aseveraciones eran ciertas, pero Ser Tyland envió a Baela a sus habitaciones y puso guardias en su puerta hasta que los regentes pudieron reunirse. Un día después, huyó del castillo y contrató a un pescador para que la llevara a Marcaderiva. Allí buscó a su primo, Lord Alyn Velaryon y le contó los planes de matrimonio; quince días después, Lady Baela, de dieciséis años, y Lord Alyn, de casi diecisiete, se casaron en el septo de Rocadragón. Aunque algunos regentes le pidieron a Ser Tyland que solicitara la anulación al Septón Supremo, la respuesta de la Mano fue de desconcertante resignación, haciendo correr el rumor de que matrimonio había sido arreglado por el rey y la corte.

"El chico es de sangre noble, y no dudo que demostrará ser tan leal como su hermano"^[21]

Posteriormente, se acordó que Baela no podría ser heredera del Trono de Hierro después de tal acción.

"La chica es salvaje, obstinada y desobediente, como nos temíamos, y ahora se ha atado al advenedizo bastardo de lord Corlys. Tiene una serpiente como padre y una ratona como madre… ¿Ese va a ser nuestro príncipe consorte?" ^[22]

Era la postura del lord comandante Fell ante el casamiento.

El matrimonio de Lady Baela y Lord Alyn fue famoso como tormentoso,^[23] y Baela conocía los rumores de que su esposo estaba involucrado con la Princesa de Dorne Aliandra Martell.^[24] En 133 d.C., Lord Alyn zarpó hacia las Tierras del Oeste y Lady Baela lo despidió con un beso y la noticia de que se encontraba embarazada; si el niño era varón, sería considerado heredero del Trono de Hierro. Lord Alyn le pidió que nombrara al bebé Corlys, como su abuelo, pero que Baela declaró que sería una niña y se llamaría Laena, como su madre.^[25]

Ese mismo año, mientras su marido estaba en Antigua, envió una carta a Baela después de que se recibió la noticia de la muerte de la reina Jaehaera, y el repentino anuncio del compromiso del rey con la hija de la Mano del Rey, Myrielle Peake. Se desconoce el contenido de la carta, pero poco después Lady Baela y Lady Rhaena llegaron a Desembarco del Rey con la joven pupila de Baela, Daenaera Velaryon, para el Baile del Día de la Doncella. El rey eligió a Daenaera como su segunda esposa, haciendo creciera el desagrado que Lord Unwin Peake sentía por Baela.

Al año siguiente, Lord Alyn Velaryon volvió a la capital a bordo del Lady Baela trayendo consigo al príncipe Viserys Targaryen, quien se creía muerto. Lord Alyn se encontró en los muelles de Desembarco del Rey con Lady Baela esperándolo con su hija recién nacida, Laena; tras besar a su esposa, Lord Alyn alzó a la niña para mostrársela a la multitud, que lo ovacionó. Con el regreso del hermano del rey, Lady Baela dejó de ser la heredera al trono. Poco después, Lady Baela regresó a Marcaderiva con Lord Alyn y su hija. Cuando el esposo de su hermana Rhaena, Ser Corwyn Corbray, fue asesinado en Piedra de las Runas, Baela viajó a Rocadragón para consolarla.

Para 136 d.C., Lady Baela estaba embarazada de su segundo hijo.^[26]

Poco antes de su muerte, su esposo tomó como amante a la sobrina de Baela, la princesa Elaena Targaryen, y tuvo con ella a los bastardos Jon y Jeyne Mares. Dado que la princesa esperaba poder casarse con Alyn, se presume que Lady Baela ya había fallecido para esa fecha.^[27]

Familia[]

Citas[]

"...Pero cuando lady Baela empuñó una espada y declaró que cortaría la mano de cualquiera que intentase hacer daño a los hombres que la habían salvado, el Lobo de Invernalia sonrió a la vista de todos y dijo que, si la dama tenía tanto cariño a aquellos perros, le permitiría conservarlos." - Hongo^[29]

"Baela es demasiado indómita. ¿Cómo puede gobernar el reino si no capaz de gobernarse así misma?" - Torrhen Manderly^[30]

Galería[]

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Referencias[]

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