Las melanocortinas[1]​ son un grupo de hormonas peptídicas derivadas del polipéptido pro-opiomelanocortina, que incluyen a la hormona adrenocorticotropa (ACTH) y a las diferentes formas de la hormona estimulante de melanocitos (MSH), que a su vez comparten una familia de 5 receptores celulares. Las melanocortinas tienen funciones en: la pigmentación, la inflamación, la homeostasis energética y la función sexual.[2]

Derivados de la pro-opiomelanocortina
Proopiomelanocortina
     
γ-MSH ACTH β-lipotropina
         
  α-MSH CLIP γ-lipotropina β-endorphin
       
    β-MSH  

Pueden ser sintéticas (creadas en laboratorio).
En humanos son endógenas, producidas a partir de la pro-opiomelanocortina (POMC) en la hipófisis.[3]
Las melanocortinas producen sus efectos conectándose y activando los receptores de melanocortina.[4]

Receptores

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Hay cinco receptores de melanocortina (MCR en inglés) acoplados a proteínas G, una familia de 5 miembros (MC1R-MC5R).

MC1R se relaciona principalmente a la Hormona Melanoestimulante (MSH) alfa y beta, involucrada en la síntesis paracrina de melanina en la piel, involucrandose en el obscurecimiento de la piel.

MC2R se relaciona principalmente a la Hormona Adrenocorticotrofina (ACTH), en las células de la corteza suprarrenal, en la zona fascicular y reticular, la estimulación de este receptor, induce el aumento del AMPc, activación de la Proteína Kinasa A, activando ciertas proteína y la expresión génica. Aumentan los receptores de superficie de colesterol LDLR, Scavengers de tipo 1 SRB1 favoreciendo la extracción del colesterol desde la sangre. Aumenta la actividad de la Lipasa Sensible a Hormonas, que convierte el Colesterol Esterificado a Colesterol Libre, permitiendo el acceso de este último a las mitocondrias. Aumenta la expresión de la HMG-CoA Reductasa, enzima fundamental en la síntesis de colesterol. Aumenta la actividad de la Proteína Reguladora de la Esteroidogénesis Aguda (StAR), que transporta el colesterol desde la membrana externa a la interna de la mitocondria. Incrementa la cantidad y la fosforilación del factor transcripcional CREB, que de manera aguda aumenta la transcripción de la Colesterol Desmolasa (CYP11A1), y de manera prolongada estimula la transcripción de otras enzimas relacionadas con la síntesis e glucocorticoides. El factor CREB estimula la proliferación y diferencación celular de las zonas reticular y fascicular.

MC3R y MC4R se expresan en regiones del sistema nervioso central directamente relacionadas con el control del apetito. Los receptores están vinculados a la generación de AMPc a través de la proteína G estimuladora (Gs) y la adenilato ciclasa.[5][2][6]

En humanos, las mutaciones en MC4R juegan un papel importante dado que se han descrito más de 100 diferentes mutaciones que constituyen la causa más frecuente de obesidad de tipo monogénico (1-6% de los pacientes con obesidad mórbida).[5][7]

Funciones 

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Las funciones fisiológicas de las melanocortinas incluyen: pigmentación, esteroidogénesis, homeostasis energética, secreción exocrina, función sexual, analgesia, inflamación, inmunomodulación, control de temperatura, regulación cardiovascular y regeneración neuromuscular.[2][8][9][10]

Referencias

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  1. OMS,OPS, ed. (2020). «Melanocortinas». 
  2. a b c Gantz I, Fong TM (marzo de 2003). «The melanocortin system». Am. J. Physiol. Endocrinol. Metab. 284 (3): E468-74. PMID 12556347. doi:10.1152/ajpendo.00434.2002. Archivado desde el original el 26 de febrero de 2009. Consultado el 2 de diciembre de 2011. 
  3. Raffin-Sanson M.L., de Keyzer Y., Bertagna X. (agosto de 2003). «Proopiomelanocortin, a polypeptide precursor with multiple functions: from physiology to pathological conditions». Eur. J. Endocrinol. 149 (2): 79-90. PMID 12887283. doi:10.1530/eje.0.1490079. Archivado desde el original el 16 de septiembre de 2009. Consultado el 2 de diciembre de 2011. 
  4. OMS,OPS, ed. (2020). «Receptores de melanocortina». 
  5. a b Santos J.L. (2009). «Sistema leptina-melanocortinas en la regulación de la ingesta y el peso corporal». Rev Méd Chile (Santiago, Chile: SciELO) 137 (9): 1225-1234. Consultado el 5 de noviembre de 2020. 
  6. Rodríguez A.M.; Suplicy H.L.; Radominski R.B. (2003). «Controle neuroendócrino do peso corporal: implicações na gênese da obesidade». Arq Bras Endocrinol Metab (REVISÃO) (São Paulo: SciELO) 47 (4). Consultado el 5 de noviembre de 2020. 
  7. González Jiménez E., Aguilar Cordero M.J., Padilla López C.A., García García I. (2012). «Obesidad monogénica humana: papel del sistema leptina-melanocortina en la regulación de la ingesta de alimentos y el peso corporal en humanos». Anales Sis San Navarra (REVISIÓN) (Pamplona: SciELO) 35 (2). Consultado el 5 de noviembre de 2020. 
  8. Solari A.J. (2004). «cap20:Genética de la pigmentación humana». Genética humana: fundamentos y aplicaciones en medicina . Médica Panamericana. p. 467. 
  9. Calzada-León R., Altamirano-Bustamante N., Ruiz-Reyes MdelaL. (2008). «Reguladores neuroendocrinos y gastrointestinales del apetito y la saciedad». Bol. Med. Hosp. Infant. Mex. (México) 65 (6). Consultado el 5 de octubre de 2020. 
  10. Guillazo Blanch G., Redolarm Ripoll A., Torras García M., Vale Martínez A. (2007). Fundamentos de neurociencia. UOC. p. 246. Consultado el 5 de octubre de 2020. 

Enlaces externos

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