MOLÍ DEL CANYER nos presenta el
siguiente tema:
“Siempre hay un antes y un
después cuando nos cambiamos de casa, de piso de ciudad o de país. Nos toca
remover en los recuerdos, decidir que es imprescindible que siga en nuestra
vida y lo que no. Una mudanza siempre trastoca nuestra vida para bien o para
mal, A veces es una decisión cuidadosamente tomada, otras es un escape desesperado.
Hoy en mi convocatoria os invito a escribir sobre cambios, de decisiones o de
oportunidades, os invito que para el próximo jueves, escribamos sobre MUDANZAS.
Siguiendo las normas de Tesalo ya sabéis: Enviarme vuestros enlaces el próximo
jueves (el miércoles también es válido) y hasta las 24 horas del viernes e
intentar no superar las 350 palabras”.
Voy recurrir a un par de personajes secundarios, que tienen sus propias historias.
El regreso
-¿Qué opciones tenemos?-Preguntó Roxana Frigia.
Estaba vestida con una camisa de Alejandro, quien estaba absorto en ella.
-Podríamos quedarnos. Serías parte del canon. Y yo, ser un dibujante
independiente.
-O podríamos hacer lo que nos gusta-dijo Roxana, arrojándose sobre su
socio creativo.
Volver con El Historietista y las aventuras de Duality.
De regreso, fueron recibidos por El Historietista en su casa. Le hablaron
de ofertas rechazadas, del deseo que tenían de continuar con Duality. Y de que
habían pensado en mudarse juntos.
-Mi departamento está peor desde que me fui-agregó Alejandro
-Y a mi familia le gusta lo que hago, que tendría que haberme quedado.
-Me consideran una mala influencia.
El Historietista lo escuchó con una sonrisa.
-Me ha pasado alguna vez-pausa- Hay alguien que conozco, de mi cuando fui
arquitecto, creo que puede ayudarlos.
Alejandro y Roxana Frigia se encontraron con una agente inmobiliaria, en
una propiedad, que les presentó
-…Y no sólo están cerca de la editorial y de la de Hector-dijo adoptado
una pose sugestiva- Sino que esta habitación es amplia, como para un taller de
modelo vivo. Y por acá pueden tener sus tableros
-Tenemos que hablar un momento.
La pareja se fue al baño.
-Ella se cree que vamos a vivir en un atelier.
-Suena muy…muy propicio.
Roxana arrastró a Alejandro hasta encontrarse con la agente inmobiliaria.
-Todavía no estamos convencidos.
Unos días después, el lugar estaba hecho un desorden con cajas, a punto
de desarmarse, alguna valija. Y no faltaban papeles tirados por el piso.
-Este lugar me recuerda a tu departamento.
De haber tenido un poco de tiempo, Alejandro habría hecho un estudio de
las expresiones de Roxana, de cierto disgusto a una expresión de deseo
incontenible.
Pero no hubo tiempo para retratar a Roxana. Como tampoco hubo tiempo para la historieta. Ni para el orden del lugar, que ahora vivían. Un lugar para el arte, la historieta, y esa espacial relación que tenían.
Más Mudanzas
en MOLÍ DEL CANYER
Los Frigia
El regreso
La chica que admiraba a
Lilith Blue
Apuntes dispersos sobre
la historieta