Hay veces que escucho canciones que parecen haber sido compuestas pensando en mí, en lo que siento, en lo que me sucede.
Será que cuando nos enamoramos, todos pensamos parecido y los cantautores hacen el trabajo de poner música a lo que sentimos.
Ayer volvía de viaje y sonaba esta canción de Ubago en el cassette...
Me muero por suplicarte
que no te vayas mi vida
me muero por escucharte
decir las cosas que nunca digas
mas me callo y te marchas
mantengo la esperanza
de ser capaz algún día
de no esconder las heridas
que me duelen al pensar
que te voy queriendo
cada día un poco más
cuanto tiempo vamos a esperar
Me muero por abrazarte
y que me abraces tan fuerte
me muero por divertirte
y que me abraces cuando despiertes
acomodada en tu pecho
hasta que el sol aparezca
me voy perdiendo en tu aroma
me voy perdiendo en tus labios
que se acercan susurrando
palabras que llegan a este pobre corazón
voy sintiendo el fuego en mi interior
Me muero por conocerte
saber que es lo que piensas
abrir todas tus puertas
y vencer esas tormentas
que nos quieran abatir
entrar en tus ojos mi mirada
cantar contigo al alba
besarnos hasta desgastarnos nuestros labios
y ver en tu rostro cada día
crecer esa semilla
crear, soñar, dejar todo surgir
apartando el miedo a sufrir
Me muero por explicarte
lo que pasa por mi mente
me muero por entregarte
y seguir siendo capaz de sorprenderte
sentir cada día ese flechazo al verte
que mas dará lo que digan
que mas dará lo que piensen
si estoy loca es cosa mía
y ahora vuelvo a mirar
el mundo a mi favor
vuelvo a ver brillar la luz del sol