Un día más, Ana abrió el tragaluz del desván,
para orearlo y secar la humedad. Cuando lo hubo hecho y mientras bajaba las
escaleras, llamo a su marido Roberto, que tomaba el último bocado del desayuno.
―Roberto,
vamos que llegamos tarde al trabajo.
―Cojo
las llaves y salgo, espérame en el coche. Grito su marido.
Ana salió, segundos después Roberto salía
cerrando la puerta de casa, ambos subieron al automóvil partiendo hacia su trabajo.
La casa había quedado en silencio, tan solo
un tenue silbido del viento bajo la puerta del desván, hacia romper aquel
silencio tan sepulcral.
A media mañana, empezaron a caer los primeros
copos de nieve del invierno. Algunos de ellos entraron por el tragaluz cayendo
dentro de una caja, que Ana guardaba en una estantería con los adornos de
navidad
Un cristal níveo cayó sobre Clin, una de las
bolas más dicharacheras de todos los adornos navideños.
Clin al sentir el frio, dio un gran bostezo y
se despertó. Al ver que estaba nevando empezó a gritar.
―
¡Despertar, despertar!
¿Quién grita de ese modo? Soy yo Clin abrir vuestros ojos comienza la gran
fiesta de Navidad pero esta vez con nieve será.
Pasados
unos segundos todos los adornos fueron espabilando y cada uno con grandes
bostezos y estiramientos saltaron de la caja.
_En
un rincón del desván, allí estaba elegante, firme como un palo, el árbol de Navidad, este
tosió una vez y viendo que nadie le escuchaba volvió a repetir la acción, con
su voz ronca y potente les hablo…
_Oíd
por favor este año debemos sorprender a los dueños de nuestro hogar, como todos
sabéis ellos nos cuidan y miman de manera especial, no solo en estas fechas,
sino durante el resto del año, nos envuelven en bonitos papeles, llenos de
colores para así poder lucir bonito, nunca
les hemos hecho ningún regalo, creo que sería una buena idea darles una
sorpresa.
_Bien!!!
Exclamaron todos al mismo tiempo, Dona
la campanita que solían colocarla al
lado de Clin dijo con su vocecita ¿pero cuál será el regalo?
Pensemos,
que les haría ilusión, tal vez un viaje, dijo Mul la bola aventurera, quizás un
coche exclamo Ter, la linda guirnalda, no tal vez sea mejor algo para que
puedan cuidar los dos, dijo con su cansada voz, la Estrella, la gran diva del
árbol de Navidad.
_Al
oír las sabias palabras que la Estrella pronunció, los demás adornos juntos
hicieron un corro y dejaron que la Estrella les contará el plan que tenía en
mente para que esa Navidad fuera diferente.
Había
transcurrido el día y la jornada laboral llegaba a su fin , Ana recogió su mesa
y se dispuso a salir , para afrontar el resto del día como a ella más le
apetecía llegar a su hogar y disfrutar de la compañía de Roberto, hacía más de cinco
años que llevaban casados, estas fechas navideñas la envolvían en una nostalgia
y a la vez alegría pues tenía ganas de desempolvar su árbol de Navidad , aquella
tarea de poner los adornos la
transportaba a su niñez cuando en casa de la abuela toda la familia colaboraba
en la decoración navideña.
_Mientras
en el hogar de Ana y Roberto se estaba confabulando una verdadera batalla de
bolas, guirnaldas, campanitas y demás adornos Navideños, todos querían
colaborar en la tarea de adornarse a sí mismos y cuando llegasen los dueños de la
casa darles la gran sorpresa.
El
árbol era el más veterano de los adornos, este se puso a danzar
a ver dónde lucia mejor si al lado de la chimenea o al fondo de la escalera... ¿dónde vas le dijo Clin? ,
con tanto moverte no puedo colgarme , el árbol le contesto mira que eres protestón
, porque no pones música , ohh muy buena idea , vamos a ver que tienen puesto
en el tocadiscos, seguro que conociendo a Ana será algo movidito y eso nos dará
energía para terminar nuestro trabajo .
_Roberto
como cada día esperaba a su mujer a la salida del trabajo, hoy era un día complicado,
Navidad estaba muy cerca y no habían comprado ningún presente para la familia,
ellos siempre lo dejaban para el final,
ocupaban su tiempo en estar juntos y soñar, si algo tenían en común era la imaginación,
jamás se aburrían y el tiempo así transcurría día tras día, pero alguna vez
tenían que bajar los pies a la tierra y hoy tocaba.
_Ana,
subió al coche y con carita de cansada, le dijo
a Roberto:
_
¿Qué te parece si nos vamos a casa derechos?
Hoy no me encuentro muy bien...
_Roberto
preocupado le dijo:
Como
tú quieras cielo, no me gusta verte cansada y llevas unas semanas que siempre
me dices lo mismo, no crees que sea hora de ir al médico.
_Ana
no contesto, solo se recostó en su hombro y dijo, no te enfades la semana
próxima te prometo que iré.
Está
bien te tomo la palabra, pero y los regalos, mañana es Noche Buena y no tenemos
nada. Ana se incorporó y cogiéndole la mano le dijo, lo más importante es que
nos tenemos los dos, sabes que no me importa tu regalo, solo quiero en estos días,
tener la paz de nuestro hogar y aunque solos estemos, siempre nos rodean la familia,
amigos y conocidos no hace falta nada más,
la Navidad Roberto es la que tú, a mí me
das.
_La
fiesta en casa estaba en su punto más álgido , pues todos los adornos , Clin ,
Dona , Mul y los demás habían formado un
verdadero guateque al más estilo años 60 la música no paraba de sonar y al
ritmo de ella no solo bailaban sino que subían bajan se colgaban de mil maneras
diferentes para ver cuál de los adornos lucia más bello en el árbol , pero en un segundo todo se quedó en
silencio… , un golpe en la puerta les hizo reaccionar, quien sería , Clin la
bola más atrevida dio un ligero salto y por la mirilla observo y no vio nada, al instante sonó otra
vez , pero esta vez no fue el timbre , sino como un golpe y un ligero sonido .
_Alarmados,
aquellos divertidos adornos que se lo estaban pasando en grande, se quedaron como
congelados sin hacer el más mínimo ruido, Clin abrió la puerta, la sorpresa fue
tan grande que un grito de alegría salió de su boquita para decir” Papa Noel ha
venido “.
La
Estrella, echo un paso hacia la puerta para ver que significaba, aquello, “cáspita”
pero que es esta cosa tan bella. Ya os lo dije ha sido papa Noel, me dio tiempo
a verle cuando se alejaba entre la nieve, miro hacia atrás y con su mano me
saludo y sonrió.
¡Que
es, que es! gritaron todos los adornos al mismo tiempo, tranquilos alzo la
estrella la voz, arrastrémoslo hacia el salón y miremos que hay dentro.
_Una
vez en el salón comenzaron a quitar el envoltorio, cual no fue la sorpresa
cuando de aquella caja salió el cachorro más lindo nunca visto, blanco y
peludo, pequeñito y tierno, dulce y amoroso , su primer sonido fue un pequeño
ladrido, que más bien era un suspiro,, con su rabito a todos saludo y su mirada
solo se reflejaba amor, Dona la campanita fue la que primera le hablo, hola
cachorrito bienvenido al hogar te trajeron al mejor sitio que pudieras estar,
el cachorrito los miraba a cada uno, cuando se atrevió hablar dijo muchas
gracias amigos, yo solo quiero dar felicidad .
Juntos
todos los adornos le dieron la bienvenida, la estrella como gran anfitriona
propuso ponerle un nombre, barajaron varios pero entre todos
creyeron que Bollito era el que le correspondía,
sabían que este regalo de papa Noel no era casualidad, era el destino quien lo
mandaba para hacer felices aquellos que vivían
en aquel dulce hogar.
_Camino
de casa Roberto y Ana solo se detuvieron en un hogar de niños que eran asiduos
a visitar, pues ellos llevaban tiempo queriendo adoptar, les encantaban los
niños, con ellos pasaban muchas tardes
de sábados , jugando les contaban
historias y sobre todo repartían cariño que era devuelto en ración doble por
esas caritas de amor.
_Una
vez puesto el nombre al cachorrito, miraron la hora y sobresaltados dijeron, al
unísono,” zafarrancho de combate “hay que darse prisa todo debe quedar listo,
puesto en el árbol para cuando lleguen nos vean que este año hemos hecho los
deberes y sus caras serán un poema pues
pensaran que están soñando “aunque en ellos esto siempre ocurre” pero esta vez
será un sueño real.
_Al
entrar en casa, Roberto y Ana no daban crédito a lo que veían, el salón estaba
en perfecta armonía con la Navidad, su
árbol destellaba más que nunca una belleza personal, los adornos parecían
hablarles las guirnaldas se movían al son del villancico que sonaba en ese
instante, la estrella brillaba y en sus destellos formaba palabras que decían:
“Gracias
Roberto y Ana por compartir con nosotros vuestra alegría”
_La
pareja se miraron, de sus ojos las lágrimas más dulces derramaron , sabían que
eran amados pero que sus adornos los
amaran, esos seres inanimados que pasan
de largo y solo unos días al año se les hace caso para ellos fue lo más bello
que jamás hicieron por ambos , cogidos de la mano se dirigieron a su árbol, a
cada uno de los adornos fueron besando estos con sus diminutos labios les
decían os queremos , habéis sido no solo en estos días, sino el resto del año
nuestros amigos siempre habéis estado pendientes si teníamos calor o frio, nos guardáis con mimo, nos visitáis de cuando en cuando os
observamos y hasta un poquito de vosotros estamos enamorados ,ahí fue donde Clin soltó una lágrima que Ana cogió
entre sus dedos, la puso en sus labios para saborear el amor de ese ser
inanimado.
La
Navidad estaba llegando a su fin, todo había transcurrido como de costumbre, tranquilidad y felicidad , hoy Ana estaba
radiante su cara resplandecía algo
distinta, era noche de reyes , como hacía cinco años al llegar las doce ,
juntos abrían los regalos , Roberto le dio el suyo , con su beso correspondiente,
ella esta vez no corrió abrirlo , sino que lo dejo a un lado y en silencio se acercó
con un sobre en la mano , apago las luces del salón, solo alumbraba su majestuoso árbol más
brillante que el sol en un día de verano .
_Roberto
toma, este es tú regalo es el que llevo
esperando darte mucho tiempo él dijo, no me asustes no serán más multas, por
dios Ana, te he dicho mil veces que no aparques en zona azul, que lo lleves a
un parking… suppppppp calla, y ábrelo…
_Alberto
sin demorar abrió el sobre cuando leyó
no supo que decir no encontraba las palabras, fue Ana que cogiendo sus
manos lo miro y dijo, si amor, por fin esta vez confirmado vamos a ser papas.
_Como
por arte de magia todo el árbol se puso a temblar a cantar todo era felicidad en ese estallido de
alegría se oyó un ladrido, gua, gua, gua … que es eso dijeron los dos, fue Clin
esa bola atrevida la que desde su sitio más estratégico del árbol dijo … Este es nuestro regalo para los dos , se
llama Bollito y desde hoy será un nuevo miembro de esta familia .
_Los
dos cogieron a ese cachorrito nunca más lo soltaron era el día más feliz de sus
vidas todo lo que deseaban lo tenían en su hogar amor, amistad y complicidad.
MORALEJA:
Los
cuentos de Navidad son proyecciones de nuestro subconsciente que muchos quisiéramos realizar y como la
Navidad es magia porque no puede llegar a ser realidad.
Campirela_
PD: Gracias por este regalo sin ti no hubiera sido posible hacer este cuento .