Han pasado casi cuatro meses desde que unas obras de reforma
comenzaron en mi casa, de ellos algo más de dos los he pasado con Ninoska refugiados en casa de nuestra hija, pero como todo tiene un principio y un
final, dichas obras que parecían interminables también forman parte de ese
todo ¡por fin terminaron!
Poco a poco y muy lentamente vuelve la
"normalidad" a mi vida, duermo en mi cama, la señal de internet ha
vuelto, tengo mi monitor, mi teclado y mi ordenador, quedan pocas cajas por
abrir, los muebles están en su sitio y apenas queda un ligero rastro de las
toneladas de polvo que Ninoska y yo hemos tenido que limpiar.
Durante este tiempo entre otras muchas cosas, ha
muerto mi admirado Leonard Cohen.
Un racista, xenófobo, misógino, sexista, machista y desertor
de la especie humana, decide y manda en el Imperio.
El Reino Unido le ha dicho a la Unión Europea… ¡Me las piro
vampiro!
Unos gilipollas que tienen el cerebro hecho agua como si
hubiese pasado por una licuadora, se dedican a pasear su odio y miseria mental
en un autobús de color naranja pintarrajeado con lemas transfobicos dirigidos a
los más pequeños y financiado con el dinero de todos, gracias a la subvención
concedida por el gobierno del PP.
Más de veinte mujeres han sido asesinadas, víctimas de la
violencia criminal machista (nótese que durante ese mismo periodo de tiempo
ningún hombre ha sido asesinado por mujer) hago este paréntesis dirigido a
aquellos hombres que enseguida te dicen… "La violencia no es machista ni
nada, la violencia siempre es solo violencia" pues ¡NO! si existe una
violencia dirigida específicamente por hombres contra las mujeres y tiene
nombre y apellido, se llama violencia machista, violencia sexista, violencia
misógina y a mí esa violencia me duele, me insulta, me ofende en mi condición
masculina y por eso la combato y denuncio.
Hoy es 8 de Marzo, hoy es el día internacional de la mujer,
hoy como hombre siento, tengo la necesidad de decir a las mujeres que sufren
maltrato, a las que sienten miedo, a las que están en huelga de hambre en la
Puerta del Sol de Madrid y a todas las mujeres, que no están solas que su lucha
por la igualdad es mi lucha hoy y los 364 días restantes del año hasta
conseguir ser iguales pero diferentes, diferentes pero iguales.
Por último quiero contar lo que me pasó hace algunas
semanas, serian aproximadamente las 11 de la noche, Ninoska y yo estábamos
tirados en el sofá, ella leía un libro y yo miraba en la televisión una
película de serie b de esas que te invitan a dormitar, de pronto Ninoska apartó
la mirada de la lectura, me miro fijamente sin decir nada, pasados unos
segundos acercó sus labios a los míos me besó y dijo te quiero, sonó tan dulce,
tan real, tan sincero, lo reconozco, mi ego se infló un poquito, y me dije a mi
mismo pa mis adentros más interiores, si después de 40 años de convivencia, de
aguantar mi genio gruñón, despistado y desordenado, aquella mujer, inteligente,
libre y autosuficiente, seguía queriéndome, algo bueno tengo que tener algo
debo estar haciendo bien, tal vez sea que yo no controlo, no amenazo, no
vigilo, no doy miedo, no reprimo, no
torturo, no maltrato, no pego y no mato.
Hoy mientras escribía esta entrada pensaba… ¡Que se jodan el
mal tratador! ¡Que se jodan los machistas asesinos! ¡Que se jodan los
devoradores de sueños! porque nunca sentirán lo que yo sentí aquella noche,
porque nunca vivirán un momento como ese, porque nunca sabrán cuanta ternura,
cuanta dulzura y cuanto amor puede contener el beso libre y sincero de una
mujer ¡Que se jodan!